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Alerta en España por un atún contaminado por compuestos tóxicos: hay 66 intoxicados

15 afectados han requerido hospitalización
El riesgo oculto del atún en España: el máximo de latas que deberías consumir

Las autoridades sanitarias en Andalucía están investigando las circunstancias que han llevado a una extensa intoxicación alimentaria que ha afectado a 66 personas hasta el momento, con 15 de ellas requiriendo hospitalización.

La causa parece ser el consumo de un lote de atún contaminado con histaminas suministrado por un proveedor de alimentos. Cabe destacar que en 2017 ya se produjo una alerta similar debido a la histaminosis por atún, lo que llevó a la retirada de seis lotes de pescado.

Según la información recopilada por el Área Sanitaria Norte de la provincia y la Delegación Territorial de Salud en Almería, las personas afectadas por la intoxicación están evolucionando “favorablemente” y ya han sido dadas de alta. Según La Voz de Almería, el pescado provenía de Madrid, donde también se están investigando casos relacionados.

La acumulación de esta sustancia puede provocar desde simples irritaciones en las palmas y plantas de los pies, urticaria, rinitis, molestias digestivas y dolores de cabeza, hasta situaciones graves como hipotensión, broncoespasmo y shock anafiláctico mortal, como ocurre en las reacciones alérgicas graves.

La histamina es una toxina natural que se produce en el pescado cuando ciertas bacterias proliferan en su carne muscular. Esto puede ocurrir por diferentes motivos, como contaminación bacteriana, pérdida de frescura del pescado, almacenamiento a temperaturas inadecuadas o errores de higiene y manipulación, según indica la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).

Los primeros datos recopilados por el servicio de Epidemiología indican que hay dos principales focos de contaminación: un servicio de catering en las instalaciones de la multinacional Cosentino en Cantoria, y un restaurante de la zona. Desde la empresa aseguran que tanto el proceso de cadena de frío como la cocción, realizada en un establecimiento cercano a su sede, se llevaron a cabo correctamente.

Cosentino señala que “casi un millar” de empleados se alimentan diariamente en su comedor en la sede de Macael (Almería), y que aquellos que se enfermaron por consumir el atún incluido en el menú son una minoría. Por lo tanto, sugieren que la contaminación no pudo haber ocurrido en sus instalaciones, sino que el origen estaría en uno de los lotes del proveedor.

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