Una familia de Tenerife alquila un Airbnb en Malta y la policía encuentra muerta a la anfitriona

Airbnb se ha convertido en una alternativa habitacional para numerosos viajeros. Por un lado, con una simple búsqueda, podemos encontrar un sinfín de pisos y apartamentos y, por otro, nos permite ahorrarnos un dinero que nos dejaríamos en hoteles en destinos muy visitados, como es el caso de Malta. Precisamente hasta allí se trasladó una familia de Tenerife para pasar unos días de vacaciones, donde habían alquilado un alojamiento a través de la plataforma. Sin embargo, todo se torció al no encontrar a la anfitriona.

Los tinerfeños relatan a la Cadena Ser que la comunicación con la dueña del inmueble había sido perfecta hasta días antes del viaje, cuando dejó de contestarles. En un primer momento, no le dieron importancia. Los comentarios en Airbnb eran muy positivos. Sin embargo, decidieron reservar un hotel de emergencia para las personas mayores que viajaban con el grupo, quienes presentaban diversos problemas de salud.

Al seguir sin tener noticias de la anfitriona, la familia chicharrera se puso en contacto con la plataforma de alquiler para comentarle la situación. Le indicaron que la llamarían ellos, pero no tuvieron más noticias al respecto.

Cuando llegaron a Malta, las personas mayores de la familia se hospedaron en el hotel que habían reservado, y acudieron a la puerta del alojamiento que habían reservado a través de Airbnb. Todo parecía estar en perfecto estado, pero nadie les recibió.

Vecinos de la zona les proporcionaron la dirección de la dueña del piso que, justamente, se encontraba cerca de allí, pero nadie les abrió la puerta. En ese entonces, volvieron a llamar a Airbnb y la persona que les atendió insistió en que tratarían de localizar a la mujer.

Al día siguiente, como no habían logrado dar con el paradero de la dueña del piso, decidieron volver a su casa. Y, al llegar, se encontraron con una importante presencia policial. La anfitriona había fallecido.

Los inquilinos cuentan al citado medio que volvieron a ponerse en contacto con Airbnb en numerosas ocasiones, pero no consiguieron que les dieran una alternativa habitacional que se ajustase a sus necesidades. Finalmente, acudieron a una agencia inmobiliaria local y, gracias a ella, lograron encontrar un lugar para hospedarse.