El cambio de modelo en el servicio de menús de guardia para los trabajadores sanitarios del Hospital de La Candelaria (mayoritariamente médicos) ha generado un gran malestar entre los profesionales debido a la escasez y, especialmente, la mala calidad de la comida, bajo un sistema de ‘línea fría’.
“Es vergonzoso. Hay gente que la coge y directamente la pide y a la basura, el potaje parece una gelatina”, resume a Europa Press el portavoz del sindicato médico de Tenerife, Levy Cabrera, que incide en que la “mala calidad” de los platos debería “poner colorado” a los rectores de complejo o del Servicio Canario de Salud.
Cabrera afirma que la medida es, en principio, temporal, debido a problemas en la estructura de las cocinas y se puede demorar hasta un mes, lo que obliga a la cafetería a servir estos menús ‘en frío’ que después son calentados en microondas y con recipientes de plástico.
Además, ha señalado que de los microondas habilitados este fin de semana la mitad se han “estropeado”.
En ese sentido insiste en que “es una desgracia” tener que comer en esas condiciones con el agravante de que no hay alternativa porque los facultativos de guardia no pueden abandonar las instalaciones e ir a comer a algún bar cercano y en una jornada que dura 24 horas.
Cabrera lamenta que no haya ninguna “preocupación” entre la gerencia del centro por no dar un “poquito de calidad” a los profesionales, y se pregunta si no es posible que la comida venga al menos de un catering externo con mayor calidad.
“Parece mentira que no se haga un esfuerzo, por lo menos, mantenerlo decente hasta que se arregle estructuralmente la cocina del hospital”, ha explicado, al tiempo que asume que se cumple con la obligación legal de facilitar la comida a los trabajadores, otra cosa es la calidad. “Trata bien a tu gente”, resume.
Ante la mala calidad de la comida varios médicos se plantean presentar quejas por escrito ante la cafetería.
Desde el hospital se aclara también a los profesionales que no se puede solicitar ningún servicio extra de avituallamiento a la cocina del complejo dado que esos alimentos están reservados únicamente para los pacientes.