El investigador privado de la familia de Jay Slater se pronuncia sobre el “vídeo angustioso que está circulando”

El investigador Mark William-Thomas, que se desplazó a Tenerife tras la desaparición del británico de 19 años Jay Slater el pasado 17 de junio, se ha pronunciado este viernes, en su perfil en “X”, sobre un “vídeo angustioso que está circulando” en las últimas horas.

“Muchas personas nos están contactando acerca de un vídeo angustioso que está circulando”, señala el ex detective, quien prácticamente desde el primer momento ofreció su ayuda a la familia del joven inglés.

“El vídeo se publicó por primera vez en las redes sociales hace nueve años y, por lo tanto, no puede ser Jay Slater”, aclara William-Thomas.

Update on a Video : lots of people are contacting us about a distressing video that is circulating . The video was first posted on a social media site 9years ago & therefore cannot be Jay Slater pic.twitter.com/6iKUozFguE

— Mark Williams-Thomas (@mwilliamsthomas) July 5, 2024

19 días desaparecido

Jay Slater lleva 19 días desaparecido en Tenerife, presuntamente en el entorno de Masca, en el Parque Rural de Teno (Buenavista del Norte), donde el pasado sábado se realizó una “batida masiva” coordinada por la Guardia Civil, en la que participó una treintena de voluntarios.

Un día después, el domingo, se dio por concluida la búsqueda, si bien las autoridades, el propio Mark William-Thomas y la familia de Jay Slater han confirmado que las pesquisas siguen su curso, manteniéndose abiertas todas las hipótesis.

Se sabe que Jay Slater abandonó, en la noche del 16 al 17 de junio, un festival en el Sur, acompañado de otros dos ciudadanos británicos que tenían una vivienda alquilada por Airbnb en Masca.

Ese mismo lunes, la anfitriona del citado inmueble afirmó que el ahora desaparecido le preguntó, a primera hora de la mañana, cuándo salía la siguiente guagua hacia Los Cristianos (Arona), donde se hospedada con los dos amigos con los que viajó a la Isla.

Logró contactar con su amiga Lucy Law, una de las personas que vino con él a Tenerife, a quien le confesó que no sabía dónde estaba, tenía sed, le quedaba muy poca batería en el móvil y trataría de volver andando a Los Cristianos.