Un estudio internacional, liderado por la investigadora Almudena Prieto del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), ha identificado por primera vez nuevos lugares de formación estelar en forma de pequeños y débiles cúmulos estelares alrededor del centro de una galaxia evolucionada.
Esta investigación ha permitido aislar y poner fechas precisas a poblaciones jóvenes de estrellas en galaxias dominadas por estrellas ancianas, conocidas como “galaxias viejas rejuvenecidas”. Los resultados del estudio han sido publicados en la revista Monthly Notices of the Royal Astronomical Society.
El equipo internacional, utilizando observaciones de telescopios espaciales y terrestres, ha identificado una constelación de cúmulos estelares extremadamente débiles en la galaxia NGC 1386, situada a 53 millones de años luz de la Tierra. Sorprendentemente, estas estrellas jóvenes se encuentran en una galaxia donde predominan las estrellas viejas, lo que resulta inusual. Los cúmulos, distribuidos en forma de anillo alrededor del centro galáctico, parecen haberse formado simultáneamente hace unos 4 millones de años.
Los cúmulos estelares, enormes concentraciones de miles o decenas de miles de estrellas ligadas gravitatoriamente, son de gran relevancia para la astronomía, ya que sus estrellas suelen nacer a partir del mismo material, proporcionando datos valiosos sobre procesos astrofísicos en las galaxias que los albergan.
El hallazgo de estos cúmulos representa un avance en la comprensión de la evolución de las galaxias, especialmente en las denominadas “galaxias viejas rejuvenecidas”, que en los últimos años han mostrado señales de reactivación en la formación estelar. Hasta ahora, la mayoría de los estudios indicaban que la formación de estrellas disminuía con el tiempo en este tipo de galaxias. Sin embargo, el estudio dirigido por Prieto ha logrado por primera vez aislar espacialmente estas poblaciones jóvenes y datar su antigüedad.
Para obtener estos resultados, se utilizaron observaciones de alta resolución angular de varios de los telescopios más grandes del mundo, como el Very Large Telescope (VLT), el Hubble Space Telescope (HST) y el Atacama Large Millimeter/submillimeter Array (ALMA), entre otros. Además, se aplicaron técnicas innovadoras de análisis de datos que permitieron identificar unos 61 cúmulos estelares y distinguir fases evolutivas de la formación estelar.
El estudio también revela el mecanismo detrás de esta inusual formación de estrellas en el centro de una galaxia evolucionada. Los datos indican que la galaxia ha conseguido captar material a través de filamentos de polvo y materia molecular que se mueven desde las regiones externas de la galaxia hacia su núcleo, donde se están formando nuevas estrellas. Estos filamentos han sido visualizados en mapas obtenidos con el VLT, el HST y ALMA.
Además, se ha detectado que este anillo de cúmulos estelares no representa el último episodio de formación estelar en la galaxia. Según los datos obtenidos por ALMA, se espera un nuevo proceso de rejuvenecimiento en los próximos 5 millones de años, con la formación de nuevas estrellas en un segundo anillo de aproximadamente 70 nubes moleculares.
Este trabajo forma parte del proyecto PARSEC, cuyo objetivo es investigar, en diferentes longitudes de onda, los núcleos galácticos cercanos y los procesos de acreción de agujeros negros. El proyecto está liderado por el IAC y cuenta con la participación de cerca de 50 investigadores de diversas instituciones a nivel internacional.