Jaime Pérez Llombet

Los gobiernos de los últimos diez años, ora Zapatero, ora Rajoy, deben a los vecinos de la ciudad 3.650 días con el proyecto de la playa de Valleseco escondido en un cajón

Luna o sol, cactus o palmera, zapato o chola. A cuenta de los carteles cada vez más indescifrables que cuelgan en los baños para indicar si hombres o mujeres, alguien se quejaba en un monólogo porque en ocasiones lo ponen imposible

En la delgadísima línea que separa el rumor de la noticia hay vecinos, periodistas y simpatizantes socialistas que aseguran haber sido testigos de las evoluciones de un objeto misterioso que, según ellos, sobrevoló ayer el Puerto de la Cruz.

Belén Allende dramatiza. Cosa diferente habría sido que el Instituto Hidrográfico de la Marina ponga nombre al volcán y lo bautice Aranda de Duero, Zinedine Zidane, Virgen del Pilar, Kevin Costner de Jesús, Ciudad Rodrigo o, por tocarle las narices, Lavas de Alpidio

Uno de los trabajos más complicados de los traductores de las series de televisión es interpretar, en una lengua distinta, los juegos de palabras

No pueden refugiarse en frases vagas o afirmaciones que destilan una cosa y la contraria.

Ser canario es preguntar qué tiempo hace cuando te llama alguien, y si nos cuentan que hace frío, mejor; es pedir que nos digan si está despejado en Madrid, Londres o Santiago de Chile, solo por saberlo, simple y prescindible curiosidad porque obviamente no tenemos intención de ir a comprobarlo

Esto ya lo hemos vivido. Un día, que soñábamos lejos, despertábamos al final del verano. Esa tarde se recogía y cerraba la casa, al coche y al caer la noche ya era otoño

El electorado y los perros huelen los factores biológicos que delatan al miedo. Son capaces de detectar -y contagiar- los cambios hormonales o de conducta que el vecino del quinto, Pedro Sánchez o los miembros de su equipo emiten al sentir miedo

A las banderas les pasa lo que a la televisión, al ron o a los teléfonos móviles. No son malos en sí mismos, depende del uso que se les dé

Alguien, responsable orgánico o no, debe contar a Mariano Pérez Hernández que en las próximas elecciones será el candidato de Coalición al Senado. Deben decírselo, porque él aún no lo sabe

Un golpe así no se digiere con facilidad, lleva su tiempo. Están viviendo horas difíciles, exigentes. Gestionan, de poco a esta parte, una realidad que no se deja gobernar