Jaime Pérez Llombet

Licenciado en Derecho,, ha trabajado en prensa escrita (durante los últimos años, como columnista de DIARIO DE AVISOS), radio y televisión. Ha sido corresponsal del diario El País y entre los años 1999-2003 fue jefe de prensa del entonces vicepresidente económico del Gobierno de Canarias, Adán Martín.

Es como una condena

Quién no tiene un familiar, amigo o compañero de trabajo que ha dicho que no saldrá estos carnavales, uf, no lo veo, con este calor, en junio, no tengo disfraz, tampoco ganas, no me veo. Saldrán. Hoy, en el transcurso de la mañana, o de la tarde, cambiarán de opinión, y saldrán. No lo saben, […]

Desinquieto

Afirman que no hay ninguna señal que anuncie o anticipe la probabilidad de una erupción en el Teide. Lanzan mensajes de calma, tranquilizantes, a la población. Se recalca que el enjambre sísmico de días atrás no debe inquietar ni abrir la puerta a especulaciones cargadas de alarma innecesaria e injustificada; ahora bien, informan de que

La resaca

Como saben los de ciencias, una de las consecuencias más perturbadoras de la relatividad es que espacio y tiempo son elásticos, inconstantes, tanto como comienza a serlo, de poco a esta parte, el electorado; en Andalucía, por ejemplo. Ahora que el bipartidismo parece recuperar el terreno que perdió años atrás con el nacimiento de siglas

La decepción

La afonía del ánimo, esa que dejó sin voz a la Isla, la que dentro o fuera del estadio apagó las palabras y las ganas a decenas de miles de gargantas, ese silencio que corrió por la ciudad como lo hace el agua cuando llueve con furia, esa afonía, ese silencio, puede medirse con facilidad.

Tanto tiempo sin verte

Tiene el carnaval, entre otras liturgias, la cansina tradición de despertar a pocos días de echarnos a la calle con la noticia de un grupo de vecinos exigiendo que alguien, en los juzgados, preferentemente, tire del freno de mano. Las quejas forman parte del programa junto a concursos, galas, conciertos u otros eventos. Están los

Gracias, Gabriela

Creyó que se le había olvidado jugar a baloncesto, sentía ansiedad, pasó por una depresión, luchó, se dejó arropar por profesionales y lo superó. Así lo resumió días atrás, aquí, en este periódico, Gabriela Sánchez- Parodi. Me despertaba por las mañanas -dijo- vencida por el siguiente entrenamiento. Colapsó. Se enfrentó al peor de los escenarios,

Los ingrávidos

Los cuerpos de quienes aspiran a ir bien situados en las listas electorales, paso preliminar de cara a continuar o regresar a los despachos de gobierno, cabildos o ayuntamientos, experimentan durante el último verano de la legislatura el síndrome de adaptación o enfermedad del espacio, ese malestar que se manifiesta cuando el cargo que ocupan

El hijo de Sira y Saturnino

El hijo de Sira y Saturnino nació el diez de septiembre de 1961, en Ourense, hizo el bachillerato en el colegio Marista de León, se licenció en Derecho por la Universidad de Santiago de Compostela e ingresó en el Cuerpo Superior de la Administración General de la Xunta. Secretario general técnico, vicepresidente y secretario general

Ya no aguanto esta pena

Hay quienes predicen el futuro observando el color del agua, los flujos, corrientes, reflujos y ondas. También hay quien tira las cartas para que los árcanos anuncien lo que esté por pasar. Algunos leen los posos del café o las líneas de la mano, analizan las cartas astrales o descifran el movimiento de los péndulos.

El enfoque

A principios de mayo apunté, aquí, en este rincón, sobre el desenfoque que históricamente ha distorsionado, y frustrado, el necesario análisis sobre el crecimiento de la población en las Islas, un debate que en el transcurso de las últimas legislaturas ha naufragado sin llegar a puerto porque, intencionadamente o no, siempre terminó saliéndose de la

Comisionado

Hace años escuché a Rafa Nadal decir que cuando realmente disfruta del tenis es cuando tiene una bola de partido en contra. Cuando debo remontar match ball —dijo— debo dar lo mejor de mí, y esa exigencia, ese esfuerzo, esa pelea por dar la vuelta a la situación, sobreponerme y encontrar soluciones y salidas, eso

Valió la pena

Dijo Chesterton que hay algo que da esplendor a cuanto existe, y es la ilusión de encontrar algo a la vuelta de la esquina. Esa ilusión, conectada con la alegría como emoción principal, puede describirse como el cumplimiento (especialmente atractivo, y satisfactorio) de una expectativa, de una posibilidad emparentada con el optimismo. La ilusión puede