En las frondosas selvas del estado de Campeche, México, un hallazgo arqueológico que los arqueólogos prometen reescribir una página del pasado precolombino. Investigadores del prestigioso Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) han tropezado con una estructura de forma circular que podría ser clave para comprender el enigmático culto a una deidad serpentina venerada por los antiguos mayas.
La construcción, oculta durante siglos bajo el espeso manto verde de la Península de Yucatán, se sitúa en lo que hoy conocemos como el sitio arqueológico de El Tigre. Los expertos postulan que este lugar fue, en otra época, el corazón pulsante de Itzamkanac, un asentamiento maya de gran relevancia regional y un hervidero de actividad mercantil.
El descubrimiento sugiere una relación profunda con el culto a Kukulcán, deidad venerada no solo en este rincón del mundo maya sino también en otras culturas de Mesoamérica, como la azteca, donde se la conocía como Quetzalcóatl. La estructura desenterrada, que data de entre los años 1000 y 1200 después de Cristo, podría haber albergado un templo en su plataforma superior, posiblemente un espacio sagrado dedicado a la adoración de esta figura divina.
La ciencia y su intento de descubrir el pasado precolombino
Esta nueva evidencia se encuentra en consonancia con otras halladas en reconocidos yucatecos como Edzná, Becán, Uxmal y la mundialmente famosa Chichén Itzá, y podría proporcionar una conexión tangible entre los distintos puntos de culto a lo largo de la región. Tal vinculación resalta la naturaleza interconectada de las civilizaciones mesoamericanas, donde ideas religiosas y comerciales fluían entre las metrópolis mayas y otros grandes centros culturales de la época.
Los arqueólogos encuentran respaldo en documentos históricos, como los Papeles de Paxbolón Maldonado, que detallan la existencia de un lugar llamado Itzamkanac, con templos erigidos en honor a las principales deidades mayas, incluyendo a Kukulcán. Tales registros escritos, junto con los datos arqueológicos acumulados, sugieren fuertemente que El Tigre y Itzamkanac son uno y el mismo.
Ernesto Vargas Pacheco, del INAH, señala que la estructura circular agrega una pieza fundamental al rompecabezas de la historia maya, iluminando una etapa en la que la región estaba fuertemente influenciada por relaciones exteriores. Diego Prieto, director general del INAH, eco de las declaraciones de Vargas, resalta la importancia del período Posclásico temprano y los lazos culturales que este descubrimiento refuerza.
El circulo tiene un motivo de culto
La estructura fue encontrada durante los trabajos de rescate arqueológico realizados como parte del proyecto Tren Maya . El proyecto es un ferrocarril de casi 1.000 millas de largo, cuya entrada en funcionamiento está prevista para diciembre. Atraviesa la península de Yucatán en México, el corazón de la antigua civilización maya, rica en antigüedades.
El Tren Maya es uno de los proyectos de infraestructura más grandes y controvertidos en la historia de México. Su objetivo es llevar turistas de los populares centros turísticos de playa de la región a lugares del interior menos conocidos, incluidos sitios históricos mayas, que representan algunas de las zonas más pobres del sur de México.
Esta revelación arqueológica surge en medio de las excavaciones relacionadas con el ambicioso proyecto Tren Maya, una iniciativa ferroviaria que busca conectar los destinos turísticos de la península y promover el flujo de visitantes a los tesoros históricos menos explorados de México así como otras estructuras que están encontrando en otras partes del mundo. El proyecto, que se prevé esté operativo en diciembre, ha sido tanto aplaudido por su potencial económico como cuestionado por sus implicaciones ambientales y los riesgos que representa para otros vestigios mayas aún sin descubrir.
El Tren Maya, pese a la polémica que lo envuelve, ha resultado ser un inesperado aliado de la historia, pues el avance de su construcción ha permitido sacar a la luz miles de artefactos y estructuras de una civilización que continúa fascinando al mundo entero. Sin embargo, este regalo del presente no deja de ser un tema de preocupación para aquellos que ven en el progreso una amenaza para la integridad de un legado invaluable.