Ciudadanos (Cs) ha denunciado la supuesta compra del voto de sus dos concejales en el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, Matilde Zambudio y Juan Ramón Lazcano, una operación de la que responsabiliza a su secretario de Organización, Juan Amigó, quien presuntamente habría ofrecido el respaldo de los dos ediles a la socialista Patricia Hernández a cambio de plenas competencias en el área de Urbanismo.
La responsable de Comunicación de Cs en Canarias y candidata a la Presidencia del Gobierno, Vidina Espino, ha afirmado en declaraciones a ‘El Día’, recogidas por Europa Press, que Juan Amigó es quien «ha estado detrás de este movimiento porque quería que Patricia Hernández fuese sí o sí alcaldesa (…) Amigó eligió a estas dos personas para la lista y va a tener que responder ante lo ocurrido».
Según Vidina Espino, el secretario de Organización se habría dado de baja del partido nada más terminar el pleno de ayer y «después de consumar esta operación», algo que ha negado el propio Juan Amigó en el día de hoy, según han confirmado fuentes autorizadas de la formación naranja consultadas por Europa Press.
En una comparecencia urgente ante los medios, la secretaria de Acción Institucional de Cs en Canarias, Teresa Berástegui, anunció que su formación había abierto expediente a Zambudio y Lazcano por haber apoyado y hecho alcaldesa a Patricia Hernández y «no acatar la orden» dada por los órganos ejecutivos del partido naranja. Precisó que ya habían desviado al Comité de disciplina lo ocurrido en Santa Cruz, donde sin el apoyo de los dos concejales de Cs, el alcalde habría vuelto a ser el nacionalista José Manuel Bermúdez, por encabezar la lista más votada.
«No han respetado la orden. Estábamos convencidos de que iban a cumplir con la disciplina. Las indicaciones era votarnos a nosotros mismos y finalmente y para nuestra sorpresa nuestros concejales no han acatado la orden de los órganos de dirección del partido», sentenció. Berástegui aseveró que ayer mismo por la mañana, ambos habían dicho que iban a acatar una orden que finalmente no cumplieron.
Vidina Espino afirmó en declaraciones a ‘El Día’ que en el partido están «muy sorprendidos» con lo sucedido en el día de ayer y quiso dejar claro que es la primera vez en la historia de la democracia en Canarias que pasa algo así. «Lo que ha ocurrido es un ‘tamayazo’. El secretario de Organización [Juan Amigó] se ha dado de baja tras consumar esta operación y es el que ha estado detrás para que hubiera una Alcaldía para el PSOE a cambio de unas concejalías para unos ediles que él puso en la lista», aseguró.
Espino incidió en que los vecinos de Santa Cruz «se merecen una explicación de lo que ha sucedido en su ciudad». «Nosotros somos los primeros sorprendidos y debemos denunciarlo. Los concejales Matilde Zambudio y Juan Ramón Lazcano nos han engañado en nuestra propia cara. Han desobedecido, a cambio de conseguir cargos públicos y unas determinadas concejalías, como Urbanismo», añadió.
La portavoz regional de Cs aseguró que a los dos ediles de Santa Cruz se les advirtió desde el partido en numerosas ocasiones, «y también horas antes de que se produjera la constitución del Ayuntamiento de Santa Cruz, que en ningún caso debían llegar a un acuerdo con Unidas Podemos para dar la alcaldía a la candidata socialista». «Se les indicó que si no se conseguía un acuerdo con el Partido Popular, que era en lo que se estaba trabajando, entonces tenían que votarse a sí mismos y, además, enseñar el voto».
«Ni el comité de pactos, ni la dirección nacional dieron el visto bueno a ningún tipo de pacto, por lo que no podían apoyar la candidatura de Hernández. Matilde Zambudio y Juan Ramón Lazcano se comprometieron a cumplir con lo establecido, es decir, a votarse a sí mismo y señalaron que su intención era quedarse en la oposición, pues no han cumplido ni una cosa, ni la otra, Está claro que todo esto ha ocurrido porque el objetivo era conseguir un sillón y áreas importantes, siguiendo la campaña orquestada por una persona que tiene intereses en el municipio. Nuestra responsabilidad era contarlo todo», aseguró Espino.