La cocina es una de las estancias más habitadas, donde la gente pasa más tiempo durante el día, sobre todo si está equipada con una bonita mesa donde se comen las comidas. Sin embargo, también es una estancia difícil de decorar, por varias buenas razones: el espacio se destina principalmente a objetos útiles, muebles y electrodomésticos, y conviene evitar un exceso de complementos de decoración, porque la cocina debe limpiarse con cuidado y es la zona de la casa donde es más fácil utilizar aceites y líquidos que pueden ensuciar y estropear los objetos. En cualquier caso, con las medidas adecuadas y prestando atención a determinados factores es posible decorar y embellecer muebles y paredes.
Decoración de muebles y electrodomésticos
Dado que gran parte de la superficie de la cocina se utiliza para colocar muebles y electrodomésticos, podemos plantearnos embellecer esta estancia colocando adornos en las superficies exteriores de estos accesorios. Un buen ejemplo de decoración son los imanes con foto para la nevera: objetos sencillos que aportan un toque extra a la habitación, sobre todo si están personalizados. De hecho, hoy en día también es posible preparar imanes nevera con fotos personalizadas, utilizando imágenes de las últimas vacaciones familiares o de un lugar que nos guste especialmente. También existen en el mercado adornos adhesivos para muebles, que se pegan fácilmente a cualquier tipo de material. No sólo nos permiten dar un toque original a la cocina, sino que también se pueden utilizar para renovar armarios y alacenas sin gastar demasiado dinero, para dar un cambio de imagen a la cocina que utilizamos a diario.
Decorar las paredes
Aunque las paredes de la cocina suelen estar muy recargadas, con los muebles cubriéndolas casi por completo, aún quedan algunas zonas libres que podemos ocupar con algunos pequeños accesorios. Por ejemplo, se puede aprovechar la zona situada encima de los armarios altos, en una cocina con techos muy altos, o incluso la zona del protector contra salpicaduras. En las zonas situadas encima de los armarios altos, es aconsejable colocar accesorios de decoración de un tamaño que los haga claramente visibles desde cualquier zona de la habitación, o utilizar colores vivos. De este modo, incluso una única decoración ofrecerá un resultado importante, contribuyendo a personalizar la cocina. Por otro lado, la zona del protector contra salpicaduras puede aprovecharse bien para colocar unas pequeñas baldas en las que colocar un reloj, un bonito adorno o un objeto que nos guste especialmente. O, sobre todo si nuestro protector contra salpicaduras está anticuado, podemos plantearnos renovarlo en su totalidad; existen materiales especiales para este fin, que pueden colocarse sobre el antiguo protector contra salpicaduras.
Un adorno útil
En las tiendas de artículos para el hogar también hay accesorios, utensilios y chucherías que también tienen una función útil en la cocina. Algunos ejemplos son las básculas de diseño, los grandes jarrones de cerámica que pueden utilizarse como fruteros o los electrodomésticos de colores vivos. Un jarrón de flores con capullos de colores ayuda por sí solo a dar vida incluso a la cocina más aburrida y anónima. Lo mismo ocurre con algunas batidoras, batidoras planetarias o tostadoras de pan, que lucen colores vivos, motivos originales y a veces incluso formas que las hacen destacar. Incluso un solo objeto puede ayudar a dar un toque original a la cocina, y si es un objeto útil aún mejor. La elección depende obviamente del gusto personal, así como de lo que sea realmente útil y práctico en nuestra cocina. Si se nos rompe la vieja tostadora de pan, podemos aprovechar para comprar una de diseño.