Científicos descubrieron en la selva amazónica una especie de anaconda gigante no documentada hasta ahora. Según dicen, puede llegar a medir 7,5 metros y pesar cerca de 250 kilogramos, lo que convierte en la serpiente más grande y pesada conocida hasta ahora en el mundo.
La especie fue encontrada durante el rodaje de la serie de Disney+ Pole to Pole de National Geographic con Will Smith, quien de acuerdo con sitio IFLScience, no tuvo ningún problema en mterse en el agua y ayudar a capturar anacondas. También contó con la participación del biólogo y presentador neerlandés Freek Vonk.
Al día de hoy se conocían cuatro especies de anacondas, la mayor de las cuales, la anaconda verde, habita en Perú, Bolivia, Guayana Francesa y Brasil. Estas anacondas, que viven en ríos y humedales de Sudamérica, son conocidas por ser no venenosas, pero constrictoras, lo que significa que matan a sus presas enrollándose alrededor de ellas, asfixiándolas y tragándoselas enteras.
Investigadores que trabajan con el pueblo indígena Waorani capturaron y estudiaron varios ejemplares de la recién bautizada anaconda verde del norte (Eunectes akayima) en la región de Bameno, en el territorio Waorani de Baihuaeri, en la Amazonía ecuatoriana. De acuerdo Vonk, el AND de esta anaconda difere en un 5,5 % de la anaconda verde y suele tener manchas oscuras en todo el cuerpo. Para darse una idea, la diferencia genética entre humanos y simios es aproximadamente del 2 %.
Los científicos documentaron varias anacondas pertenecientes a la nueva especie «al acecho de sus presas» mientras remaban en canoas por el sistema fluvial amazónico.
«El tamaño de estas magníficas criaturas era increíble: una de las anacondas hembras que encontramos medía la asombrosa cifra de 6,3 metros de largo», declaró en un comunicado Bryan Fry, coautor del estudio y profesor de la Universidad de Queensland. «Hay informes anecdóticos del pueblo Waorani sobre otras anacondas de la zona que miden más de 7,5 metros de largo y pesan alrededor de 250 kilogramos», añadió el Dr. Fry según reporta el sitio The Independent.
El hallazgo, según los investigadores, es fundamental para la conservación de las anacondas, que son depredadores vitales para mantener el equilibrio en sus ecosistemas.
Una población sana de anacondas significa que sus ecosistemas son vibrantes, con abundantes recursos alimenticios y agua limpia, mientras que la disminución del número de la serpiente puede indicar problemas ambientales, dicen los científicos. «Así que saber qué especies de anaconda existen, y controlar su número, es crucial», escriben los investigadores en The Conversation.
Las anacondas y sus hábitats están cada vez más amenazados por la fragmentación de la tierra causada por la agricultura industrializada, los incendios forestales, la sequía, el cambio climático, así como la contaminación por metales pesados vinculada a los vertidos de las actividades de extracción de petróleo.