Frank Cuesta ha sorprendido a su audiencia con un comunicado directo, crudo y sin concesiones en su canal de YouTube, donde ha desmontado muchas de las versiones que durante años habían sostenido su imagen pública. En un vídeo titulado “Disculpas a Chi y comunicado”, Frank Cuesta ha admitido errores, exageraciones, invenciones y engaños relacionados con su trayectoria como defensor de animales, sus problemas personales y sus proyectos en Tailandia. Las declaraciones de Frank Cuesta llegan después de semanas de polémicas, rumores y acusaciones de maltrato animal y estafa relacionadas con su conocido Santuario Libertad.
Desde los primeros minutos del vídeo, Frank Cuesta explica que no es capaz de decirlo todo frente a cámara y decide leer un texto que había escrito previamente. La lectura, según afirma, le sirve para “dejar claras muchas dudas que la gente tenía”. En el texto, Frank Cuesta empieza pidiendo disculpas a Chi, la persona que trabajó con él en el santuario y que recientemente ha hecho públicas algunas informaciones que han motivado este comunicado. Frank Cuesta admite haber hablado mal de Chi por celos, ante la posibilidad de que su proyecto se convirtiera en una competencia directa. Además, reconoce haber sido responsable del acoso en redes que Chi recibió tras su detención.
Una de las confesiones más duras de Frank Cuesta es que “ha sido un personaje” y que todo lo que ha construido mediáticamente se le ha ido de las manos por un problema de “mitomanía y ego”. En palabras textuales, el aclara: “Ni soy veterinario ni herpetólogo. Tengo conocimientos sobre animales, pero no profesionales”. Esta declaración echa por tierra años de contenido audiovisual en los que Frank Cuesta aparecía como una figura autorizada en el manejo de fauna salvaje, especialmente en contextos asiáticos. El propio Frank Cuesta admite que la credibilidad que muchos depositaron en él ha sido fruto de una construcción artificial.
Primer comunicado de Frank Cuesta
En cuanto a su estado de salud, el ha desmentido que padezca cáncer, aunque confirma que desde hace años lucha contra una mielodisplasia, un tipo de trastorno en la médula ósea que afecta la producción normal de células sanguíneas. La aclaración responde a informaciones previas, algunas difundidas por él mismo, que hablaban de una enfermedad terminal. “No tengo cáncer”, reitera el, insistiendo en que su diagnóstico fue erróneamente interpretado o comunicado.
El punto más delicado llega cuando el habla de su santuario. Asegura que todos los animales han sido comprados y no rescatados, como había afirmado anteriormente. “Es más una granja de animales que un santuario”, dice. Reconoce que nunca ha rescatado animales en sentido estricto y que muchas muertes en el centro fueron causadas por su propia negligencia. “Todo ha sido parte de un show”, añade el, y confiesa que la situación, aunque ha mejorado, fue durante mucho tiempo insostenible.
Segundo comunicado de Frank Cuesta
El vídeo, que ya suma miles de visualizaciones, también aborda su detención en Tailandia. Frank Cuesta aclara que no fue delatada por ninguna persona cercana, sino que se debió a una denuncia anónima de una ciudadana tailandesa. Esta denuncia puso en evidencia que Frank Cuesta tenía animales sin la documentación legal correspondiente, algo que él mismo admite con naturalidad en el vídeo. “Tengo que asumir mi responsabilidad”, dice con firmeza.
En su comunicado, el expresa que ha llegado el momento de ser transparente. “Pido disculpas públicas por haberme aprovechado de tanta gente”, afirma. Con esta frase, Frank Cuesta intenta cerrar una etapa marcada por el espectáculo, la controversia y la confusión entre su vida personal y su imagen pública. Insiste en que no hay sarcasmo ni ironía en sus palabras, algo que muchos usuarios han cuestionado tras ver el vídeo. De hecho, Frank Cuesta fijó un comentario en la publicación aclarando que lo que se dice en el vídeo “es la realidad”.
El caso de Frank Cuesta está provocando un terremoto entre sus seguidores, pero también entre quienes lo han criticado durante años. La confesión pública de Frank Cuesta reabre el debate sobre la veracidad de muchos contenidos relacionados con activismo animal, el uso del espectáculo para causas sensibles y la responsabilidad ética de las figuras públicas que manejan plataformas de gran alcance. Lo que queda claro es que, tras este comunicado, la figura de Frank Cuesta no volverá a ser la misma.
En apenas unos minutos, el ha hecho estallar todo el relato construido durante más de una década, reconociendo errores y asumiendo públicamente una verdad que muchos intuían, pero que él nunca había aceptado de forma tan directa.