Agentes de la Guardia Civil pertenecientes han instruido diligencias en las que investigan a una mujer como presunta autora de un delito de estafa relacionado con “falsos” rituales de santería.
Los agentes iniciaron la investigación tras recibir la denuncia de la propia víctima, la cual manifestó que desde el año 2014 hasta el presente, había estado interactuando con otra mujer debido a que ésta última decía ser “santera”, iniciándose así la denunciante en esta práctica.
Durante todos esos años, la denunciante se había tenido que trasladar en varias ocasiones a la isla de Cuba debido a que la supuesta “santera” la presionaba con afirmaciones tales como, que si no accedía, su hijo sería discapacitado o que su marido perdería la cordura. Conforme a lo que la víctima accedía, siendo todos los gastos del viaje abonados por ella, tanto los de su familia como los propios de la familia de la supuesta santera.
Modus operandi
Destaca que entre las exigencias de la “santera”, la denunciante debía realizar pagos en oro a los santos, por lo que en compañía de ésta última se dirigió a distintas joyerías de la isla de Tenerife para comprar joyas que ésta última previamente seleccionaba y se llevaba posteriormente, para supuestamente entregarlas en ofrenda a los santos.
Investigación
Los agentes de la Guardia Civil realizaron durante la investigación diversas gestiones con distintos establecimientos de compraventa de oro, gracias a lo cual pudieron comprobar que la denunciada, supuesta “santera”, había realizado desde el año 2016 hasta el presente año distintas ventas de joyas, ascendiendo a más de 3.000 euros el importe que había recibido por las mismas.
Posteriormente, se comprobó que las joyas vendidas por la “santera” correspondían con las compradas por la denunciante como ofrenda a los Santos. La víctima reconoció sin ningún género de dudas que la mayor parte de las citadas joyas se correspondían con las que ella misma había comprado por petición de la “santera” para entregarlas a los Santos como ofrenda, aprovechándose de las convicciones y miedos de la denunciante.
Además, los agentes también han podido comprobar que efectivamente la denunciante había solicitado un préstamo de 7.000 euros, dinero que utilizó para afrontar los gastos citados anteriormente (viajes, piezas de joyería, etc.) amparando su solicitud con la entidad financiera en una obra en su vivienda, que tras gestiones realizadas se ha comprobado que nunca se ha realizado.