Se repiten los sacrificios ilegales de animales en plena ciudad y su estafa, con la particularidad de que ya no sólo se abandonan los cuerpos en los alrededores de los cementerios.
Si bien fue el cementerio situado en el barrio de La Minilla el lugar de dichas prácticas el sábado pasado, en el día de ayer los vecinos del barrio de al lado, el de Escaleritas, han comprobado que conviven con un demente estafador que abandona gallinas sacrificadas por los jardines y parterres del barrio.
Así se lo han hecho saber los ciudadanos a la Plataforma Leales.org que por tal motivo, en la última quincena del día de San Juan y de Los Santos Inocentes, tiene implementado un algoritmo que oculta el contacto de los gatos en adopción. Esta peculiaridad se realiza para evitar el sacrificio de gatos por santeros estafadores y de ignorantes sin escrúpulos que los contratan y se dejan estafar pagando promesas intangibles que perjudican a los inocentes animales.
Además de esas dos fechas, las quincenas previas a Navidad y Reyes también son ocultados los contactos de las adopciones, esta vez de perros y gatos para evitar adopciones impulsivas y caprichosas que se convierten en abandonos de Semana Santa y verano o cuando el animal crece.
Como siempre se recuerda, el contratar los servicios de estafadores sin escrúpulos que maltratan a los animales es delito penal castigado con cárcel, al igual que cometen delito quien los usa en rituales de sacrificio ilegales. Además de delito es una infracción municipal por abandono de animales muertos en la vía pública.
Por otro lado, los animalistas critican que el concejal de salud pública y protección animal de la capital, Luis Zamorano, regale sin control los gallos y gallinas que capturan en otros barrios.
Se recomienda por tanto no endeudarse más, intentando que la muerte dolosa de un animal solucione los problemas que cada uno tiene que resolver por sí mismo.