El secretario general de CEOE-Tenerife, Eduardo Bezares, ha afirmado este jueves que los empresarios están «muy preocupados» con el hecho de que los trabajadores afectados por un ERTE –más de 195.000 en Canarias– no puedan cobrar, en su mayoría, hasta el 10 de mayo.
En declaraciones a Europa Press asume que los ERTE tienen un «trámite complejo» y un volumen muy elevado pero la organización puede mejorar dado que hay «contramensajes continuos» en el Ministerio de Trabajo y Economía Social en lo que se refiere a la presentación de la documentación.
Bezares comenta que ha habido una «falta de planificación evidente» en procesos administrativos que son «sencillos» lo que «complica más» todo si bien resalta la «buena voluntad» del SEPE en Canarias, cuya oficina «está volcada» en contactar con los agentes sociales y empresarios.
En cuanto a la renta mínima vital anunciada por el Gobierno central, afirma que es entendible «a la vista de la situación económica» derivada de la pandemia del coronavirus pero espera que «no se aproveche para dejarla de forma permanente».
El secretario general de la patronal tinerfeña señala que en España se abonan al año unos 17.000 millones en rentas similares para colectivos de difícil inserción, algo que le «parece bien», sin obviar que «la mejor renta es un salario».
Por ello, propone que los fondos adicionales que pueda habilitar el Estado se orienten al tejido productivo, «que da empleo, genera impuestos y permite financiar el estado del bienestar».
«Espero que no perdamos la vista, sea coyuntural y no haya venido para quedarse», ha agregado.
Bezares pone como ejemplo el caso de Navarra donde «no hay nadie que quiera trabajar en el campo» si, dependiendo de la situación familiar, hay personas con rentas de 1.200 o 1.400 euros que «son más atractivos» que «ir a trabajar 8 horas al día a una explotación».
«No caigamos en los errores flagrantes de algunas comunidades pues tendrían un efecto perverso para la economía», destaca.