Se llamaba Galileo, el caballo que fue nombrado el mejor semental de la historia, ha muerto. El caballo irlandés, nacido en 1998 y que estaba valorado en más de 200 millones de euros y uno de los mejores para los criadores que buscaban un caballo ganador para sus carreras.
Su rentabilidad era insuperable sin duda, ya que una monta con este semental ascendía a más de 600.000 euros. Ese precio y sin tener asegurado que la potra quedase embarazada.
En 2001 le jubilaron a nivel competitivo para sacar provecho de sus cualidades como semental, que fue esparcido por cada rincón del mundo hasta alcanzar los 2.306 ‘hijos’ purasangres que han ganado 4.163 carreras -89 clásicos de Grupo 1- por valor de unos 250 millones de euros. Incluso sus nietos han alcanzado notoriedad.
A 50.000 euros se vendían sus servicios cuando empezaron a hacerlo, en 2002, y solo cinco años más tarde la cifra se había triplicado. Desde entonces, los acuerdos se habían realizado de forma privada.