Un ciudadano irlandés de 29 años identificado como Shane McInerney ha sido imputado de varios delitos que conllevan hasta 20 años de prisión por su comportamiento durante un vuelo de Dublín a Nueva York en el que, visiblemente ebrio, mostró las nalgas a una auxiliar de vuelo, se negó reiteradamente a llevar mascarilla y lanzó una lata a otro pasajero.
McInerney se quejó además de la comida servida durante el vuelo y amenazó al piloto con un puño cerca de la cara cuando éste se interesó personalmente por el incidente. Durante el descenso al Aeropuerto Internacional JFK de Nueva York se levantó del asiento, según informa la prensa irlandesa.
Finalmente fue detenido tras el aterrizaje y se le impuso una fianza de 20.000 dólares, que abonó, y ahora ha sido acusado de “agresión intencionada e intimidación a un miembro de la tripulación de vuelo”, por lo que podría ser condenado a hasta 20 años de prisión.
“Durante el vuelo de unas ocho horas el acusado se negó reiteradamente a llevar mascarilla pese a que se le requirió decenas de veces por la tripulación”, explica la documentación judicial.
Al parecer McInerley, antiguo futbolista, había viajado a Estados Unidos para entrenar a un equipo de Daytona, en Florida.
La aerolínea, Delta, ha reiterado su “tolerancia cero con los malos comportamientos”. “Nada es más importante que la seguridad de nuestro personal y de nuestros clientes”, ha advertido.