No se puede ocultar la expansión que se está produciendo en relación al consumo de cannabis medicinal en el mercado nacional español.
Las investigaciones realizadas demuestran los beneficios a la salud que ofrecen, una situación que ha propiciado un giro total en la percepción que la sociedad tenía de esta planta y sus derivados cannábicos.
El cambio de paradigma en cuanto a la aceptación de esta sustancia química ha abierto un campo enorme de productos de consumo en los más variados formatos, ya sea en píldoras, aceites, cremas, cápsulas e incluso en gotas.
Un nuevo mercado que se presenta al público consumidor en diferentes tipos de tiendas.
1. Las tiendas online
Una tienda online para comprar CBD es la primera de las opciones que el consumidor elige para comprar este producto, en alguna de sus formulaciones.
El motivo está bastante claro, accediendo a este tipo de ecommerces desde la comodidad del hogar o en el tiempo de descanso en el trabajo, e incluso en un paseo por el parque desde el móvil, se pueden explorar las diferentes presentaciones, sus marcas, las opciones disponibles, tranquilamente.
Además, si no se está completamente seguro de qué es lo que quiere comprar, puede leer las descripciones del producto e incluso interesarse por las opiniones de otros consumidores que ya lo han probado y, por supuesto, comparar precios.
No son pocas las tiendas online que asesoran a sus visitas con un chat o respondiendo a los mails que estos les envían.
En cualquier caso, la mayoría de ellos ofrecen información adicional sobre los componentes y sus beneficios, guías de consumo y otros datos, como los análisis en laboratorio de los productos, para asegurar que cumplen con la normativa legal y que ayudan a los clientes a decidirse por el formato de CBD que más les interese.
2. Las farmacias
También es posible comprar CBD en algunas farmacias, concretamente en la sección de parafarmacia y bajo la categoría de cosméticos.
Es aquí donde se localizan las opciones de CBD en cremas, lociones y aceites que, habitualmente, se usan para el cuidado personal.
Hay que ser precavidos en este sentido, ya que estos productos no tienen la consideración de ser aptos para el tratamiento de ninguna enfermedad o condición médica. Por lo tanto, en estos establecimientos no se venden flores de CBD, ya que en España se consideran objetos de colección y no se deben consumir, tampoco se van a encontrar vaporizadores ni resinas.
3. Los estancos
El consumo de cigarrillos está en decadencia desde hace ya algunas décadas, por lo que los establecimientos que tenían este producto como principal propósito de venta, como son los estancos, han tenido que abrir el abanico de su oferta vendiendo CBD.
En concreto, es partir de la pandemia cuando algunos estancos comenzaron a ofrecer productos relacionados con el CBD, como son los cigarrillos electrónicos, productos de vapeo o aceites.
4. Los growshops
Aunque se trata de un tipo de local más especializado en la venta de semillas de marihuana, elementos de cultivo para esta planta y parafernalia del fumador, es habitual que también ofrezcan su propia sección exclusiva destinada al CBD, ya sea vendiendo flores, comestibles como gominolas, resinas, aceites, cremas y hasta productos para mascotas.