Tras el hallazgo del cuerpo de Olivia ayer por la tarde, las autoridades están enfocadas ahora en encontrar rastros de la hermana y del padre, Tomás Gimeno, y esclarecer los detalles del terrible y sin sentido asesinato. La principal hipótesis es que el hombre mató a las niñas antes de salir de su domicilio, pues nadie vio salir a los tres juntos. Presumiblemente metió sus cuerpos en las bolsas y maletas que después cargó en la lancha. Una vez en alta mar, lanzó los cuerpos por la borda, lastrados con el ancla, y después se suicidó.
El cadáver de hermana mayor Olivia, fue hallado en el interior de una bolsa de deporte, lastrada en el fondo del mar por un ancla a la que estaba amarrada. Este ancla es la misma que le faltaba a la embarcación del padre, Tomás Gimeno, encontrada al día siguiente de la desaparición. Al lado apareció otro bolso parecido, pero vacío. La localización se produjo a mediodía de este jueves, y el cadáver fue trasladado a tierra sobre las 18:00 horas.
Todavía se desconoce el paradero del padre de las niñas y de su hija Anna, por lo que el buque oceanográfico Ángeles Alvariño sigue rastreando la zona en la que se perdió por última vez el rastro del teléfono móvil de Tomás Gimeno. El barco está dotado de un radar de barrido lateral y de un robot submarino, que han sido vitales para el hallazgo, primero, de una botella de aire comprimido y una funda nórdica de Tomás Gimeno, y, este jueves, para encontrar en esa misma zona el cuerpo sin vida de Olivia.