En este 2020 ha tenido lugar el centenario de la muerte de Benito Pérez Galdós (Las Palmas 1843 – Madrid 1920), novelista, dramaturgo, cronista y político español, considerado uno de los máximos representantes del Realismo español del siglo XIX y uno de los autores más importantes no solo de panorama en lengua española sino también de la cultura europea.

Nació en Gran Canaria y se trasladó a Madrid 1862 para estudiar derecho, carrera que abandonó para dedicarse al periodismo y a labores literarias. Fue un escritor tan prolífico que su obra es inmensa y compleja. Se compone de una gran cantidad de novelas que se agrupan en diferentes ciclos. Desde muy joven se interesó por las cuestiones sociales del momento, defendiendo causas como los derechos de la mujer, la educación o la ciencia. Con sus obras aparecían también críticas a la Iglesia y las desigualdades sociales. Pérez Galdós fue un hombre liberal y progresista, muy crítico con la intolerancia que reinaba en su tiempo y comprometido con la realidad social.

Si analizamos su estilo, observamos muchos rasgos característicos de la novela contemporánea, como por ejemplo la utilización del monólogo interior. Con esto nos damos cuenta de que su técnica gozaba de una sorprendente modernidad. Pérez Galdós cuidaba rigurosamente la documentación sobre escenarios, ambientes y costumbres.

Fue académico de la Real Academia Española desde 1897 y llegó a ser propuesto al Premio Nobel de Literatura en 1912.
La crítica coincide en calificarlo como uno de los mejores novelistas en castellano, después de Cervantes. Sin duda continuará siendo una celebridad indispensable de la cultura española.