El abuelo de Yuraima Díaz era cazador y el padre de Eduardo de Cobos, inspector jefe de policía en la capital tinerfeña. Con estos mimbres no extraña que un buen día se conocieran y consolidaran una relación en donde la pistola, en absoluto, es tercera en discordia. Todo lo contrario. Es amiga íntima de la pareja más top del tiro mundial.

Yuraima Díaz (Yuri) y Eduardo de Cobos se conocieron en el gimnasio-spa del Hotel Mencey de la capital tinerfeña. Él entrenaba y ella trabajaba como monitora. Al poco tiempo se casaron y hoy en día son la única pareja en el Mundo cuya vida en común gira en torno al tiro práctico o recorridos de tiro, pues los dos se dedican profesionalmente a este deporte. Y no lo hacen nada mal. Reúnen un palmarés envidiable. Él ocupa, en la actualidad, el segundo puesto de la clasificación mundial y ella es la subcampeona de España y la campeona de la Liga Nacional. Viven intensamente en la élite de las pistolas, tanto en competiciones oficiales, como desde la instrucción en centros universitarios, cuerpos de policía y clubes deportivos en España y en el extranjero. Así, por ejemplo, De Cobos, integrante del equipo nacional de España desde 1998, es entrenador del mejor equipo que existe en el panorama internacional: el Club Archangel Michael de Ekaterinburgo (Rusia), con el que ha ganado todas las ediciones del Euroasia Extreme Open. A título individual, este año, entre otras pruebas y compromisos, preparan el Nacional (septiembre) y el Mundial, que se celebrará en noviembre y diciembre en Tailandia.

Eduardo de Cobos se inició en el tiro a los trece años de la mano de su padre, Melchor, inspector jefe del Cuerpo Nacional de Policía en Santa Cruz de Tenerife, campeón nacional de tiro olímpico y de tiro policial. Esto le llevó a que en 1997 ganase su primer Campeonato de España de Recorridos de Tiro y al año siguiente la Liga de Europa Central. Además, también se iniciará en las artes de combate con el full contact y el kick boxing, perfeccionándose más tarde con el jiu jitsu (es cinturón negro primer dan) y el bujinkan, que reúne nueve escuelas de artes marciales.

Con posterioridad, en el año 2000, ingresará en el Cuerpo de la Policía de la capital tinerfeña, ocupando destino en la Sección de Seguridad Ciudadana y después en la Unidad de Intervención Policial (Unipol). En estos momentos disfruta de una excedencia y no duda en afirmar que el plan de formación en armamento y tiro que reciben sus compañeros aventaja a cualquier otro que se pueda impartir en un cuerpo policial. Lógico. Han aprendido de un maestro que cuenta con dos mundiales de tiro policial, dos europeos, cuatro euroasiáticos y veinticinco primeros puestos en los nacionales absolutos en tres categorías distintas. Es lo que tiene formarse con el FBI, los SWAT y demás equipos de la aristocracia policial en Europa e Israel.

Yuri Díaz, por su parte, se enamoró de su marido y de las pistolas al mismo tiempo. Fue en 2013 y desde entonces le sigue la estela, incluso, alguna vez, le ha ganado. Es lo que tiene practicar un deporte inclusivo en donde mujeres y hombres compiten en la misma categoría, ya que la fuerza no es esencial. Antes bien, prima la precisión, la potencia y la velocidad, palabras que, en latín (diligentia, vis y celeritas), conforman el lema de la International Practical Shooting Confederation. Se trata, apunta Eduardo de Cobos, de encontrar el equilibrio entre la puntería y la velocidad de ejecución en el uso seguro del arma, junto con la utilización de la potencia adecuada para impactar en los diferentes objetivos.

El entrenamiento incluye horas de preparación física específica para tiradores, la cual realizan en Tenerife con Isaac Rojas en el centro Health Space. De igual forma, corren, nadan y practican en el campo de tiro de La Gallardina, en La Laguna, con una intensidad que se adapta al programa de las competiciones. Eso sí, prácticamente todas los mañanas entrenan en seco el desarrollo de la técnica neuromuscular del tiro. Esto es, desenfundar y apuntar con nervios de acero. «Nuestra vida es el deporte. No hay día que no pensemos en entrenar», dicen al alimón.

La rutina cuando están en la Isla comienza después de dejar a las niñas en el colegio. Yuri y Eduardo tienen dos hijas (Araiza, 15, y Ekaterina, 4) y «una perra, un loro, dos peces y tres tortugas», ríen cómplices.

La pareja está en plena forma. Salta a la vista. Y es consciente de los beneficios para la salud que presentan los recorridos de tiro: «Es una medicina magnífica para prevenir el párkinson y el alzhéimer. Además, como trabajamos a tope cuerpo y mente, la carga de adrenalina que generamos es muy beneficiosa para combatir el estrés». Esta realidad hace que muchas personas practiquen el deporte como terapia en La Gallardina. Y entre ellas no faltan las mujeres. Yuri Díaz, fija en la Selección Española Femenina, es su principal exponente y razones no le faltan: «El tiro es muy competitivo y genera un físico atlético muy funcional. Es difícil no engancharte».


Texto / J. L. Z.

Fotos / Susi Arlán

Estilismo / Mayte Núñez para la boutique Etxart & Panno

Maquillaje y Peluquería / Eva Cruz