Y es que, según cuenta el estadounidense en el diario USA Today Travel, “estaba emocionado por conocer las playas canarias, pero no tanto al sentirme intimidado por el tamaño de mi cuerpo”.
“Fue difícil relajarme y tomar el sol cuando otro turistas que se alojaban en mi hotel me miraban como si fuera una criatura de la Laguna Negra“, declara el viajero que, además, vivió una experiencia desagradable cuando “una madre alejó a sus hijos de mí cuando bajé los escalones de la piscina”. “¿Pensaría que ser gordo es contagioso?”, agrega.
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) indican que el 74 por ciento de los adultos en Estados Unidos tiene sobrepeso. A este respecto, de las personas que se sienten gordas, al menos, el 43 por ciento se enfrenta a la vergüenza corporal, e incluso, al acoso, tal y como recoge una encuesta de 2018 elaborada por la Universidad de Chicago.