«A mí me dan miedo y salgo corriendo». Este el mensaje que acompaña al vídeo que una vecina de Santa Cruz de Tenerife ha enviado a este periódico para saber «¿qué hace el Ayuntamiento con esta plaga?». En la grabación, una culebrilla ciega de las macetas reptando por una zona de tierra del capitalino parque de La Granja.
Se trata de una especie de serpiente exótica invasora, denominada Indotyphlops braminus, que puede alcanzar los 17 centímetros de longitud. Fue detectada por primera vez en Gran Canaria en el año 2004 y, tres años después, en Tenerife, momento en que el Cabildo Insular y la Fundación Neotrópico iniciaron un programa para localizarla. Sin embargo, a día de hoy, se ha extendido a todo el Archipiélago.
El biólogo Jaime de Urioste, presidente del citado centro de fauna exótica en Canarias, ha contado a DIARIO DE AVISOS que «es un animal totalmente inofensivo para el ser humano y no representa ningún tipo de peligro para los animales domésticos o la ganadería», ya que «no es venenosa ni muerde». Aunque reconoce que «los vecinos nos han contactado asustados porque piensan que son crías de serpiente».
La culebrilla ciega de las macetas es originaria de la India y ha sido distribuida accidentalmente por todo el mundo a través de la tierra de las macetas u otros cultivos. Pese a que en muchos lugares ha provocado graves desequilibrios en los ecosistemas, en las Islas «no tenemos constancia de ello». «Este animal suele comer especies que sirven para descomponer la materia orgánica, como hormigas o lombrices, pero, de momento, no parece que amenace al cultivo», indica el experto de la Fundación Neotrópico.
Actualmente, Canarias no cuenta con ningún plan para intervenir porque «no parece necesario y hay otras prioridades». Además, Urioste explica que es una especie muy compleja de tratar porque estas serpientes no precisan de machos para procrear, pero insiste en que no hay que alarmarse si se localiza alguna en zonas agrícolas, parques o jardines.