El ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, ha afirmado este miércoles que «no hay ningún problema» en adelantar la hora del toque de queda si se acuerda «entre todos», pues eso es «lo que cuenta».
Ábalos ha realizado estas declaraciones en Mérida, donde ha intervenido en el Foro de Infraestructuras de la Cadena SER Extremadura junto al presidente del Ejecutivo extremeño, Guillermo Fernández Vara.
Unas horas antes de la reunión del Consejo Interterritorial de Salud, que este miércoles abordará este asunto, el ministro ha reclamado que todos los gobiernos autonómicos asuman los consensos que se logran porque si «se intentan imponer singularidades por fuera del acuerdo es lo que no tiene sentido» y es «lo que algunos hacen».
Al margen de ello, ha insistido en que «si hay acuerdo no hay ningún problema» y que el propio decreto del estado de alarma establece que muchas de las medidas podrán ser modificadas por el Gobierno sin necesidad de ir al Congreso, «por tanto tampoco hay ningún drama en ello».
Ha argumentado además que el decreto fijó el tramo horario actual de aplicación del toque de queda precisamente «para dar margen a la polémica que había entonces sobre las horas» y cuando nadie fijaba su inicio en las ocho de la tarde.
Ha considerado que se debe tener visión «armómica e integradora» de la realidad y no adoptar posiciones «fundamentalistas», y ha recomendado también que se rebaje la intensidad de las posiciones «porque muchas veces lo que se expresa no es la convicción de una medida, sino la necesidad de polemizar frente a otra administración» para «tratar de ocultar determinadas responsabilidades».
«La diferencia no está en el qué se plantea, sino en el cómo se plantea», ha aseverado Ábalos que, sin mencionarla expresamente, ha aludido a las declaraciones de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, en las que rechazó adelantar el toque de queda manifestando que no cuenten con ella «para arruinar más a la hostelería en España».
«No deja de ser frívolo… cuando estamos hablando de vidas de personas», ha manifestado el ministro.
José Luis Ábalos ha subrayado que su gobierno decretó un confinamiento domiciliario en la primera ola al que se tuvo que enfrentar con una oposición parlamentaria «tremenda», incluidas movilizaciones, y ha señalado que si no se ha aplicado ahora es porque «la situación tampoco es la misma», dado que las capacidad de respuesta y el conocimiento de la situación no es ligual, y porque ya está en marcha el proceso de vacunación.
Por su parte, el presidente extremeño ha insistido en que todo tiene ventajas e inconvenientes, como por ejemplo las aglomeraciones en las horas previas si se adelanta el inicio del toque de queda, y ha defendido que las decisiones se deben tomar desde el análisis «sin tirarnos a la cara la hora a la que vamos a decretar el toque de queda».