Un vuelo a Canarias, que partió desde Manchester con destino Fuerteventura, se vio obligado a aterrizar después de que se escuchara una “gran explosión” a bordo, tal y como relata el Manchester Evening. El informe de lo ocurrido se ha conocido en las últimas horas.
Con 178 pasajeros a bordo, el vuelo a Canarias salió desde el aeropuerto internacional de Manchester el pasado mes de marzo, cuando, en el momento del despegue, se pudo escuchar una “gran explosión” que alertó a las personas que iban dentro de la aeronave. El avión tuvo que aterrizar al instante para comprobar qué había ocurrido.
Una investigación encontró que la cola del avión de TUI había golpeado la pista durante el despegue. Ambos pilotos sintieron un golpe y la tripulación de cabina informó haber escuchado la cola del Boeing 737 chocar contra la pista. “La Rama de Investigación de Accidentes Aéreos (AAIB) descubrió que el copiloto, a quien se le entregó el control durante el despegue, tenía “poca experiencia” y había experimentado largas pausas en su entrenamiento debido a los bloqueos de Covid-19″, indica la publicación.
La puesta en marcha del avión, así como el rodaje en la pista, fue realizado por el piloto, entregando este el control al copiloto a la hora del despegue. En ese momento, según el propio informe, ráfagas de viento provocaron cierta inestabilidad en la aeronave, por lo que la cola de la misma llegó a golpear con la pista del aeropuerto.
El vuelo a Canarias logró despegar
Una vez establecidos en el ascenso el comandante contactó con la tripulación de cabina para confirmar si habían oído algo anormal en el despegue. La tripulación de cabina en la parte trasera del avión confirmó que había escuchado “una gran explosión” durante el despegue.
El comandante informó al control de tráfico aéreo sobre lo sucedido y declaró que se podría necesitar ayuda ya que optaron por detener el ascenso del avión mientras revisaban qué hacer. Luego decidieron regresar a Manchester.
“Durante el despegue, el copiloto en formación hizo girar la aeronave demasiado rápido, lo que provocó que la cola de la aeronave golpeara la pista”, desvela el informe que ha visto la luz en las últimas horas.
En este vuelo a Canarias, según el mismo escrito, el copiloto había experimentado “varios retrasos durante su entrenamiento”, lo que habría dificultado “aprender la técnica correcta”. “Es probable que su poca experiencia, junto con un ligero viento cruzado, provocara el incidente”, finaliza.