El Cabildo de Gran Canaria ha retirado cerca de 15.000 ejemplares de tilapia de Mozambique de la Charca de Maspalomas en el marco del proyecto Masdunas, que ha incluido medidas para el control de especies exóticas invasoras de flora y fauna.
Un comunicado de la Institución Insular destaca este martes que la tilapia es un pez de origen africano que puede llegar a medir 35 centímetros y forma parte de la dieta humana, aunque fuera de las piscifactorías es una especie invasora que crece y se adapta en ambientes artificiales o naturales.
Añade que la alimentación de la tilapia es muy diversa y abarca desde insectos y plancton hasta pequeñas crías de aves, además de que se puede encontrar en más de 130 países.
La nota explica que la hipoxia -falta de oxígeno debido a la falta de lluvias que renueven el agua- y la subida de temperatura en el ambiente bajan el nivel de agua en la Charca y provocan que las tilapias mueran.
Solo en el pasado mes de enero se retiraron 30 kilos y en estos momentos le corresponde al Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana retirar las que aparecen muertas.
El director de Masdunas, Miguel Ángel Peña, recuerda que antes de esta invasión la Charca contabilizaba once especies de peces, numerosos ejemplares de algas y vegetación acuática, pero que la flora y la fauna han disminuido de forma notable debido a la presencia de la tilapia de Mozambique.
Y es que esta especie invasora se adapta fácilmente a la temperatura y salinidad del agua, es agresiva y voraz, además de practicar el canibalismo si no encuentra alimento, por lo que es depredadora no solo de la vegetación, sino de otros peces.
Según Peña, otro peligro es que la tilapia pueda llegar al mar, pues cabría la posibilidad de que se adaptara y afectara al hábitat, amenazando a especies marinas como los equinodermos, y también ahuyentaría a las pollas de agua y a los chorlitejos que deseen anidar.
Para el control de este pez, el Cabildo colocó varias veces por semanas redes trampa y, a través de este procedimiento, retiró cerca de 15.000 ejemplares en los últimos meses.
Resalta que algunas de las tilapias muertas se envían al Parque Científico Tecnológico Marino de Taliarte para su estudio y el resto se entregan para su eliminación a una empresa de gestión de residuos.
Para el técnico insular, la principal dificultad es la falta de estudios especializados que indiquen cómo contrarrestar el aumento en su población, ya que lo que abundan son publicaciones para su crianza en piscifactoría o generar reproducción.
El Cabildo asegura que seguirá vigilante con la invasión de la tilapia de Mozambique en la Charca de Maspalomas y, con el uso de nasas, controlará la población de una especie invasoras que fue introducida por el ser humano en Gran Canaria.