Se llama Gemma Watts, es una mujer británica de 21 años que se hizo pasar por un chico de 16 para abusar íntimamente de adolescentes, la mujer ha sido condenada este viernes a ocho años de prisión por un tribunal del Reino Unido. Los investigadores del caso creen que el número de víctimas podría llegar a 50.
Según la Policía Metropolitana en un comunicado, Watts empleaba el alias de Jake Waton, de 16 años, para captar a sus víctimas a través de las redes sociales. Se ganaba su confianza intercambiado mensajes con ellas antes de concretar una cita y cometer las agresiones íntimas. «Les hacía creer que entraban en una relación con alguien en quien podían confiar», ha indicado la investigadora Phillipa Kenwright.
Las investigaciones se iniciaron a raíz de la denuncia de una chica de 14 años de Hampshire, que denunció haber sido agredida íntimamente por su novio en abril de 2018. Posteriormente, los agentes identificaron a otras dos víctimas más, ambas menores de 18 años, cuyo caso era similar al primero.
Para engañar a sus víctimas y convencerlas de que era Jake Waton, Watts se recogía el pelo en un moño, utilizaba una gorra y vestía pantalones holgados y sudadera. Incluso llegó a engañar a los padres de algunas de estas adolescentes, ha señalado Scotland Yard.
Tras su arresto, Watts señaló a la Policía que todo era un juego y afirmó que «solo trataba de animarlas».
La jueza Susan Evans ha calificado el comportamiento de Watts de «depredador» al planificar las agresiones íntimas, ya que todas las jóvenes a las que atacó eran vulnerables y algunas habían sido intimidadas y tenían una baja autoestima, según recoge el diario británico The Guardian.