Si una cosa tenemos clara es que los niños son adorables, divertidos y encantadores. Eso es lo que cree la mayoría de la gente, y es fácil saber por qué. Sin embargo, cuidarlos no es tarea fácil. De hecho cuidar de niños es como cuidar adolescentes: cambian de humor como una veleta girando, siempre tienen hambre y duermen cuando les apetece.
Por eso no es de extrañar que las niñeras quieran cobrar un salario digno como cualquier trabajo por cuidar de niños ajenos. Incluso si sus padres creen que sus hijos se portan maravillosamente y que la niñera solo tiene que pasarse el día comiendo helados, jugando y viendo la tele, de relax.
Algo así le pasó a esta niñera, que fue avergonzada por una madre por “atreverse” a pedir 15$ a la hora. Según la madre, ese precio era abusivo por cuidar de sus buenos hijos, que iban a estar durmiendo la mayor parte del tiempo. Por suerte, esta niñera tuvo el sentido común de mantenerse firme y no ceder.