El documental ‘El estafador de Tinder’ ha sido un éxito rotundo para Netflix. En él, tres mujeres narran cómo fueron engañadas por un hombre que se hacía llamar Simon Leviev. Pero la mentira fue mucho más allá, pues decenas de chicas fueron víctimas de las artimañas de este personaje, que gracias al documental han quedado al descubierto. El último testimonio que ha visto la luz es el de la joven argentina Valeria Calpanchay.
Calpanchay, de 28 años de edad, se registró en Tinder en 2018 para encontrar a su media naranja. Y entre los que más le llamaron la atención se encontraba Leviev, que en realidad se llama Shimon Hayut.
“Tenía una cuenta de Tinder para ese entonces, así que vi a este chico llamado Simón, que parecía lindo y que viajaba mucho. También me encanta viajar, he estado en muchos países, así que pensé que le gustaría que nos encontremos. Tenía curiosidad”, indicó Valeria al diario británico The Mirror.
Tras hacer el “match”, los dos jóvenes empezaron a intercambiar mensajes y, de buenas a primeras, el estafador le pidió su número de WhatsApp para quedar en persona.
“Nuestra cita fue muy espontánea y sucedió un día después de que coincidimos. Acababa de terminar el trabajo y me envió un mensaje de texto preguntándome si estaba libre para encontrarnos. Creo que envió un mensaje de voz”, detalla Valeria.
No obstante, la argentina confiesa que detectó ciertas actitudes del «millonario» que no terminaban de convencer. “Los millonarios no muestran su dinero en Tinder, porque no es necesario”, reflexiona.
Quedaron para cenar a un hotel exclusivo de Múnich, en Alemania, pero decidieron, por él, cambiar de lugar.
Valeria recuerda que Simon era un «tipo hablador; le gustaba demasiado hablar de sí mismo», pero nunca de su niñez o de su familia. Tampoco le cuadraba que el chico hablara constantemente de sus negocios delante de ella o que cuando estaba con ella atendiera llamadas un tanto «extrañas».
“Era raro que él hablara de otras chicas, diciendo que siempre le enviaban fotos, incluso me mostró algunas. No me fiaría de alguien que le muestra fotos privadas a otras chicas”, asevera la argentina.
Tras una hora de cita, y a pesar de la actitud extraña del chico, Valeria no vio nada de peligroso en Simon. Sin embargo, no era su tipo de chico. No sirvieron de nada los intentos del chico por volver a quedar con ella y no volvieron a hablar nunca más.