sociedad

La lucha para ser uno más

Centenares de personas celebraron en Santa Cruz, en la VI Marcha por la Discapacidad, el Día Internacional de los derechos del colectivo, unos 315.000 habitantes en el Archipiélago, dispuestos a llevar sus quejas ante los tribunales
Numerosas personas no quisieron dejar acudir a la marcha, que tuvo que suspenderse poco después de leer el manifiesto. Fran Pallero

La lluvia se convirtió ayer en un obstáculo más que sortear por parte de los varios centenares de personas que se concentraron en la capital tinerfeña para participar en la VI Marcha por la Discapacidad. Como cada año, con motivo del Día Internacional de la Discapacidad, que se celebra hoy, los colectivos canarios que engloban a este sector de la población organizaron una serie de actos con el fin de sensibilizar a la sociedad sobre las barreras y dificultades a las que cada día tienen que hacer frente, al igual que hacer valer sus derechos para, como ellos mismos indicaron, ser uno más.

Cerca de 300 personas se congregaron en la santacrucera plaza Weyler. A pesar de la lluvia, muchos quisieron participar un año más en la marcha, haciendo frente a las inclemencias meteorológicas, eso sí, de la mano de paraguas y chubasqueros. Pese al interés de los participantes,el agua imposibilitó que la marcha hiciera el recorrido previsto. Antes de partir, los representantes de algunas de las organizaciones convocantes tomaron la palabra y leyeron un manifiesto.

Asimismo, el presidente de la Plataforma Tenerife Discapacidad, Raúl Cordero, insistió en la importancia de reivindicar los derechos de este colectivo porque “es algo justo”. Añadió que “no importan las barreras ni físicas ni meteorológicas ni políticas para hacer valer nuestros derechos”. Del mismo modo, criticó que el Gobierno canario haya congelado en los presupuestos de 2018 la partida dedicada a discapacidad, aunque se mostró confiando en que, con el incremento de diez millones de euros anunciado el viernes para materia de dependencia, una parte pueda ir para este sector de la población.

Numerosas personas no quisieron dejar de acudir a la marcha, que tuvo que suspenderse poco después de leer el manifiesto. Fran Pallero
Numerosas personas no quisieron dejar de acudir a la marcha, que tuvo que suspenderse poco después de leer el manifiesto. Fran Pallero
Numerosas personas no quisieron dejar de acudir a la marcha, que tuvo que suspenderse poco después de leer el manifiesto. Fran Pallero

Ana Mengíbar, presidenta de la asociación Queremos Movernos, puso de relieve el “incumplimiento” de la ley de accesibilidad universal, y anunció que, a partir de ahora, todas estas faltas ya no se resolverán por vía administrativa, como se ha hecho hasta el momento, sino que se acudirá a los tribunales de justicia. Además, tanto Mengíbar como el vicepresidente del colectivo, Toño Cabrera, quisieron recordar a Lali, la secretaria de la asociación, quien falleció el pasado mes de julio. Cabrera insistió en la labor llevada a cabo por Lali en este ámbito, a la que calificó de “guerrera”, y reclamó la igualdad de derechos para que cada personas con alguna discapacidad sea considerada “una más”.

Se estima que la cifra de personas con algún tipo de discapacidad alcance el 15% de los canarios, unos 315.000 habitantes. El manifiesto leído antes de la marcha denunció que este sector “continúa en situación de maltrato”, al sentirse excluido de ámbitos como la educación, el deporte, la cultura o la salud. Además, en el documento se criticó la carencia de plazas residenciales y de centros de día para una adecuada atención.

Por último, en el texto se recordó que, tras 14 años, se sigue sin cumplir con la Ley de Accesibilidad y que en el Archipiélago “no existe ni un solo edificio de uso público que pueda enmarcarse dentro de los criterios de la accesibilidad universal”.