Los reyes de España, Felipe VI y doña Letizia, destacaron ayer, durante su visita a Tenerife, el papel que ha jugado la alimentación durante la crisis alimentaria y concretamente, el papel “fundamental” que ha tenido la agricultura canaria en los últimos meses. Así lo manifestaba Felipe VI a la consejera regional de Agricultura, Ganadería y Pesca, Alicia Vanoostende, a su llegada a la finca El Confital, en Granadilla de Abona.
El viaje de los monarcas a Canarias se enmarcaba en la gira por todo el país que tienen prevista realizar durante estos meses. El Archipiélago fue el primer destino que los reyes eligieron para desplazarse, ya que deseaban trasladar su apoyo tanto al turismo, como a la agricultura, con sendas reuniones con representantes de estos sectores en Gran Canaria y Tenerife.
Así, tras pasar la mitad del día en la isla vecina, Felipe VI y doña Letizia se trasladaron hasta el aeropuerto de Tenerife Sur, donde se interesaron por las medidas puestas en marcha por AENA para garantizar la seguridad ante la pandemia.
Fue a las seis y media de la tarde cuando los monarcas aparecieron en la finca El Confital, en Granadilla de Abona. En aquella inmensa plantación de plátano, pepino y papaya, fueron recibidos por la consejera de Agricultura, Ganadería y Pesca del Gobierno de Canarias, Alicia Vanoostende.
La elección del enclave, según explicó la consejera a los medios, se debió tanto a su “especial ubicación, cercana al aeropuerto de Tenerife Sur”, como a la “modernización” y “adaptación” de una finca que en los últimos años ha diversificado sus cultivos “apostando por opciones alternativas frente al tomate que les permiten que la actividad sea rentable”.
A la vez que los reyes, llegaron también a la finca diferentes autoridades del Archipiélago, como el presidente regional, Ángel Víctor Torres, la ministra de Política Territorial, Carolina Darias, o los presidentes del Parlamento, el Cabildo de Tenerife y el Cabildo de Gran Canaria, Gustavo Matos, Pedro Martín, y Antonio Morales, respectivamente.
Alicia Vanoostende comenzó valorando ante los monarcas el valor del producto canario: “Cuando entendamos que detrás de La Gería en Lanzarote hay más que un vino, que hay también un paisaje mágico, podremos implantar esa estrategia de soberanía alimentaria por la que apostamos en el Gobierno de Canarias”, resaltó.
Sin embargo, prosiguió la consejera, la situación actual del sector es de “una crisis profunda” y enfrenta muchos retos, como “el problema del mantenimiento de la ficha financiera de las ayudas europeas, el Brexit para el sector tomatero, o la falta de agua de riego”.
Felipe VI, por su parte, agradeció el papel de toda la cadena alimentaria durante la pandemia, y especialmente el de la agricultura, “que fue una pieza fundamental en el seguimiento de la vida en estos meses”, dijo.
Además, el monarca insistió en el aporte económico del sector primario en la economía española durante el confinamiento, que catalogó como “muy importante” de cara a las exportaciones.
Entre otras preocupaciones, el rey mostró interés por la recuperación del suelo agrícola “que se ha ido reduciendo con los años”, y que ello sea compatible con la “rentabilidad”, con la “sostenibilidad” y con la “lucha contra el cambio climático”.
Mientras, la reina se interesó por la producción del plátano y lamentó que “pese a que este año hubo mucha producción, al final la demanda fue menor”.
En este sentido, Vanoostende achacó la mayor producción a un invierno “muy cálido” y reconoció que este hecho obligó a los productores a “realizar retiradas del mercado para poder mantener los precios”.
Por su parte, el director de la la plantación, Jorge Brotons, relató a los monarcas las dificultades por las que atraviesa la agricultura debido a la competencia de Marruecos, un país que, en su opinión, no cumple con los acuerdos de la Unión Europea en materia agraria.
Tras este primer intercambio de sensaciones, los monarcas y las autoridades regionales fueron guiados hasta las plataneras, donde se les explicó el funcionamiento de la plantación, para más tarde trasladarse hasta la empaquetadora de fruta Las Moradas, de la empresa Bonyssa. En este último lugar, los reyes se encontraron con representantes de organizaciones agrarias y profesionales.
Al término de la visita, el presidente del Gobierno de Canarias, Ángel Víctor Torres, valoró ante los medios que la visita de los reyes “es muy importante para nuestra tierra” y agradeció a Felipe VI sus diversas llamadas telefónicas durante los últimos meses para preocuparse por las diferentes crisis que ha atravesado el Archipiélago.
A su vez, dijo que la ocasión sirvió para que los monarcas conocieran de primera mano “las singularidades de las Islas como regiones ultraperiféricas”, como el hecho de los elevados costes de agua a los que la agricultura canaria se enfrenta debido a su localización.
De lejos, Felipe VI y Letizia se despidieron con la mano, para luego entrar en el coche oficial. Letizia, que bajó la ventanilla, tuvo el mismo gesto también con la decena de ciudadanos que se agolpaba a las puertas de la empresa para ver a los monarcas.
“Ganaderos que tiran leche, la flor trabajando al 50% y el vino parado”
El presidente de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos, Rafael Hernández, o el de ASPROCAN, Domingo Martín Ortega, fueron algunos de los representantes de las organizaciones agrarias y profesionales del sector primario presentes en el encuentro de los reyes en la empaquetadora de Las Moradas. Ángela Delgado, presidenta de Asaga, dijo a los medios que había trasladado a los monarcas la situación del sector, que pasó de ser esencial en la crisis a “estar trabajando a medio gas, con un sector de flores y plantas trabajando al 50%, con los ganaderos tirando leche, y el sector del vino paralizado”.