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Tijarafe busca a los dueños de cuatro fotos históricas donadas en los años 90

Fueron utilizadas en una exposición en 1994, y, por motivos que se desconocen, no volvieron a manos de sus propietarios originales

Los archivos municipales atesoran, con frecuencia, verdaderas joyas documentales; piezas de tiempos pasados que nos dan pistas sobre cómo era la vida entonces, y que incluso nos pueden servir de inspiración para diseñar el presente y el futuro. Entre los elementos más habituales en este tipo de espacios se encuentran las fotografías, aunque no siempre se conoce su autoría. Precisamente unas instantáneas anónimas han protagonizado un misterio que, desde los años 90, envuelve al Ayuntamiento de Tijarafe.

Ayer, el ex profesor del IES Eusebio Barreto Lorenzo e investigador particular Juan Heradio Rodríguez Lorenzo dio a conocer, en su página de Facebook Heradio Publicaciones, que el Consistorio norteño “busca a los dueños” de cuatro fotografías históricas de la localidad. Se trata de unas imágenes en blanco y negro halladas en dependencias de la institución dentro de “un sobre sin membrete identificativo”, por lo que su procedencia es una incógnita.

Según cuenta el matemático, a principios de los años 90 el Ayuntamiento “pidió colaboración a los ciudadanos para realizar una exposición de fotos antiguas del municipio, en el marco de las fiestas patronales”. Es en ese momento en que se sitúa el cambio de manos de las instantáneas. La pregunta que surge es: ¿por qué no fueron devueltas a sus propietarios? “Mirando los programas de las fiestas, he visto que en el año 1994 se hizo una exposición, que organizó Vidalia Rocha, de fotos de personas y paisajes de Tijarafe a través del tiempo”, cuenta Heradio, como la muestra en la que pudieron ser exhibidas por primera vez.

Por aquellos años, José Luis Lorenzo Barreto -más conocido como Pepe Luis- era concejal de Cultura. Heradio supone que, al finalizar la exposición, el edil “debió guardarlas”, si bien reconoce que no sabe el motivo por el que no se devolvieron. Aquí es importante destacar que el citado servidor público cayó gravemente enfermo y poco después, en 1999, falleció, “por lo que las fotos cayeron en el olvido”, señala, “hasta que ahora se encontraron”.

Para resolver el misterio, dice que el Consistorio se ha puesto en contacto con él, dado que es conocedor de importantes pasajes de la historia tijarafera. Y, por su parte, se ha encomendado al poder de las redes para localizar a la familia o familias que donaron las fotos. “Si alguien las reconoce y sabe de quiénes son, se le agradecería que lo comunicara, bien a través de este medio o en el Ayuntamiento, para devolverlas”, concluía el mensaje.