El Partido Animalista Pacma ha denunciado la muerte de un perro en una terraza en Torrevieja (Alicante) a causa de un posible golpe de calor tras estar varios días atado en un solario privado de una vivienda. La formación asegura, en un comunicado, que tanto los vecinos como el concejal independiente del Ayuntamiento, Nacho Torre-Marín, pusieron en conocimiento de la Policía Local y la concejala de Protección Animal, Concha Sala, lo que ocurría pero que “no fueron capaces” de poner fin a la situación, que ha terminado con el fallecimiento del can.
Los hechos ocurrieron entre el 17 y el 20 de agosto, cuando los residentes avisaron al Ayuntamiento de que el animal no podía huir del sol al estar atado del cuello y se encontraba “extremadamente sofocado” y “abandonado” en un domicilio del complejo de urbanizaciones de ‘Torrevieja Nueva’. Esto se dio durante los siguientes tres días, hasta que el 20 de agosto los vecinos grabaron “con impotencia” el fallecimiento del animal.
Sala ha confirmado, en declaraciones a Europa Press, que la Policía Local ha instruido un atestado que ha sido remitido a un juzgado de Torrevieja y ha defendido también la labor de los agentes locales, dado que asegura que las patrullas intervinieron y se aplicó el protocolo pero que fue “imposible” contactar con los dueños de la vivienda.
Además, señala que los efectivos tomaron declaración a los vecinos a los que se les preguntó para elaborar un informe y que “en ningún caso ni ninguno de ellos advirtió que el animal estuviese mal cuidado”.
Según el testimonio de los vecinos y del edil en la oposición, recogido por PACMA, el pasado 17 de agosto, aproximadamente a las 17.30 horas, y tras “infructuosas llamadas” a la Policía Local y a la concejala responsable, Torre-Marín se acercó a la vivienda con la intención de poner en conocimiento de la protectora local ADAT lo que ocurría, aunque no pudo acceder al interior del domicilio para socorrer al animal.
Posteriormente, tanto el concejal como miembros de la protectora dieron aviso a la Policía Local, cuyos efectivos se acercaron a la vivienda y declararon, según la formación, que el animal “estaba fuera de peligro porque las horas de sol ya habían pasado” y se marcharon sin comprobar el estado de salud del perro.
El partido animalista asegura que la edil responsable recibió vídeos e imágenes del animal “atado por el cuello y en busca de la sombra”, pero que no respondió hasta pasadas unas horas. Esta misma situación se repitió durante los siguientes días, hasta que el animal acabó falleciendo.
La protectora junto a Pacma y el edil de la oposición piden que se depuren responsabilidades y “que se llegue hasta el final del asunto”. La protectora ADAT ya ha interpuesto una denuncia y tanto el concejal Torre-Marín como Pacma barajan secundarla.
También exigen la dimisión de la concejala y la elaboración y cumplimiento de un protocolo de rescate que “anteponga la vida de los animales sobre los trámites burocráticos necesarios agilizando los rescates para evitar más muertes como esta”.
Vecinos de ‘Torrevieja Nueva’ y el concejal denunciante han anunciado para los próximos días una concentración en memoria del perro fallecido para pedir que la situación “no se repita más” y que “se mejore la coordinación entre las fuerzas locales para lograr combatir la lacra social del maltrato animal y la pasividad administrativa que la secunda”.
LA POLICÍA “NO INTERVINO” CON EL PERRO EN UNA TERRAZA
Sin embargo, la edil ha defendido la labor de los efectivos locales y ha señalado que, después de tener conocimiento de la situación del animal, se puso en contacto con la Policía Local, que intervino en “repetidas ocasiones” y aplicó el protocolo que desde el cuerpo de seguridad tienen previsto para estos casos.
“En varias ocasiones, representantes de la Concejalía se personaron hasta la vivienda en cuestión, tanto acompañados por miembros de la Policía como por su propia cuenta, para comprobar la situación que se estaba produciendo, aunque en ninguna ocasión se pudo acceder a la misma por no responder ninguna de las personas que allí vive”, expone la edil.
Asimismo, señala que en cada una de las ocasiones “fue imposible contactar con los vecinos, dueños y responsables del animal”, tanto por parte de la Concejalía de Protección Animal como la propia Policía Local y que los vecinos que prestaron declaración no dijeron que el animal estuviese mal cuidado.
Tras el fallecimiento del animal, la concejal ha ordenado que se diera traslado del cadáver del perro al hospital veterinario que tiene contrato con el Ayuntamiento de Torrevieja para realizar un informe clínico y ha indicado que “bajo ningún concepto se incinere el cuerpo por si se necesitaran pruebas posteriores”.
“El Ayuntamiento de Torrevieja ha puesto en conocimiento del Juzgado de Guardia todos estos hechos, por los que ya hay abiertas diligencias, tras las cuales se podrán conocer los extremos de esta triste situación y así esclarecer los hechos. La Concejalía de Protección Animal es la primera interesada en depurar las responsabilidades que correspondan una vez que se haya tramitado el procedimiento que se ha iniciado”, ha zanjado.