El Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan) ha confirmado en su cuenta oficial en Twitter que la nube de polvo detectada en la mañana de este martes en la costa de Fuencaliente fue originada por un “derrumbe en el acantilado, posiblemente causado por la intensa actividad sísmica que afecta a la isla de La Palma estos últimos días”.
El Comité Director del Plan Especial de Protección Civil y Atención de Emergencias por Riesgo Volcánico de Canarias (Pevolca) del Gobierno de Canarias ha indicado este martes que la sismicidad se mantiene elevada y puede provocar nuevos desprendimientos, por lo que insta a la población a seguir los consejos de las autoridades para reducir riesgos.
La temblores continúan localizándose, principalmente, a profundidades de entre 10 y 15 kilómetros. También se han registrado terremotos a profundidades superiores a 20 km, que en las últimas horas siguen teniendo una elevada magnitud, aunque con menor frecuencia. Se mantienen valores altos de la amplitud de la señal de tremor, con pulsos de intensificación. La magnitud máxima observada en las últimas horas ha sido de 4.2 mbLg, que corresponde a uno de estos eventos que tuvo lugar a 36 km de profundidad, con una intensidad de IV EMS.