Muchas veces, por olvido, flojera o comodidad, dejamos el cargador del celular conectado. Sin embargo, es importante comprender las posibles consecuencias que esto puede acarrear. Si eres de los que siempre deja enchufado el cargador de tu celular, debes saber que sí puede haber consecuencias. Aunque la mayoría de los celulares actuales cuentan con cargadores que no se sobrecalientan ni dañan al equipo, es mejor prevenir posibles accidentes.
Una de las consecuencias negativas que puede surgir es el consumo pasivo de energía. Aunque no consume la misma cantidad de energía que grandes electrodomésticos como un refrigerador, es innecesario tenerlo conectado todo el tiempo.
El llamado «consumo vampiro» se produce cuando un dispositivo está apagado pero sigue conectado a la corriente. Por lo tanto, es importante considerar esta situación y tomar medidas para evitarlo.
Además, debemos tener en cuenta que el funcionamiento del celular puede verse afectado con el tiempo debido al desgaste de sus componentes internos. En casos extremos, incluso podría producirse un cortocircuito dependiendo de la ubicación dentro del hogar donde se encuentre conectado.
Si deseas ahorrar en la factura de electricidad, es recomendable desconectar el cargador cada vez que no lo estés utilizando. Aunque su consumo parece insignificante, ya que se trata de aproximadamente 0.2 watts por hora, a largo plazo podría tener un impacto en tus cuentas.