El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha afirmado que el Gobierno está haciendo una monitorización de las redes sociales «con el fin de comprobar algunos discursos que pueden ser peligrosos o delictivos», así como con las «campañas de desinformación».
«Son las propias plataformas, siguiendo sus protocolos de actuación, las que acuerdan la retirada, no es el Gobierno, ni el Ministerio del Interior ni las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad», ha precisado este sábado Marlaska en rueda de prensa telemática desde La Moncloa.
Asimismo, el ministro para escapar de la controversia y de la gran censura informativa ha resaltado que la crítica «es la base del Estado de Derecho». «Nos enriquece y nos fortalece a todos, no hay ninguna limitación a la crítica».