Todo un drama generado tras el anuncio de la separación entre Bertín Osborne y Fabiola Martínez, esta última ha querido salir al paso para aclarar «ciertos detalles de la separación» que se han dicho y que «hacen mucho daño».
La expareja del cantante venezolana ha publicado un extenso vídeo en su perfil de Instagram en el que habla sin tapujos sobre la separación del cantante, a pesar de que se había propuesto «no entrar» en el tema. «Que no os engañen… Espero que esto evite especulaciones y malas interpretaciones», ha asegurado en el texto que acompaña al vídeo.
En primer lugar, su expareja Martínez se ha referido a las condiciones del divorcio de la pareja para «evitar que se siga especulando en esta línea». En este sentido, ha manifestado que cuando se casaron firmaron de mutuo acuerdo una «separación de bienes absoluta», es decir, «ninguno de los dos tiene ninguna obligación con el otro».
«Otra cosa es la situación de los niños», ha aclarado. «Ambos, por ley, tenemos obligación de asumir la responsabilidad de su manutención», ha agregado Fabiola, que ha dicho que «esas son las únicas cosas que en lo que respecta a lo económico, Bertín y yo tenemos que hablar».
Además, ha querido puntualizar que la casa que ambos compartían en Madrid «es alquilada, no es en propiedad nuestra», y que el dueño quería venderla desde hace mucho tiempo. «Al no tenerla adaptada para Kike, decidimos no comprarla», ha indicado.
Respecto a su futuro, Martínez ha explicado que seguirá trabajando «como lo he hecho siempre desde que tengo 16 años».
A nivel personal, la venezolana ha admitido que «probablemente vengan tiempos muy complicados», ya que «una separación nunca es fácil, son muchas las cosas que hay que colocar a nivel emocional».»Sé que ha desilusionado a muchas personas que creían en el amor perfecto», se ha sincerado. «El amor existe, pero no es perfecto. Los dos nos merecemos estar bien y ser felices, y eso es lo que estamos intentando, sin hacer daño a nadie», ha añadido.
Sobre sus hijos, ha reconocido que su divorcio no es fácil para ellos, «pero tampoco es bueno ver a dos padres que no tienen buena relación. Y antes de llegar a ese extremo hemos tomado esa decisión, con cariño, con respeto, con madurez, con responsabilidad, intentando hacerlo lo mejor posible».
En esta nueva etapa que inicia, Fabiola Martínez también se enfrenta a cambios en sus redes sociales, donde hasta ahora aparecía con el nombre de Fabiola Osborne. «Yo adopté el apellido de casada porque en mi país, Venezuela, es costumbre. Y yo soy de costumbres y de tradiciones, por eso yo he llevado el apellido de mi marido el tiempo que me he sentido su esposa», ha explicado.
Asimismo, Fabiola ha indicado que se encuentra «bien, tranquila, serena» y «con ilusión de empezar cosas nuevas». No obstante, ha confesado tener «tristeza de no haber conseguido mantener ese matrimonio como en un principio esperábamos. No ha podido ser, sin más. No hay más», ha zanjado.
«Hay que seguir, la vida sigue, evoluciona, crecemos, aprendemos, y en ese momento es donde yo me siento ahora», ha concluido Fabiola.