Las islas Canarias son la comunidad autónoma con los peores servicios sanitarios, por detrás de Murcia, Andalucía y Cataluña, esta última ligeramente por encima, mientras que Navarra, País Vasco, Aragón y Asturias ocupan las primeras posiciones, según un análisis de la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP).
Utilizando datos principalmente de 2018 como gasto per cápita en sanidad, camas, quirófanos y médicos por 1.000 habitantes, listas de espera, gasto farmacéutico, o externalización de servicios, la asociación ha asignado a cada comunidad autónoma una puntuación, que va de un rango máximo de 126 a 31.
Navarra ha obtenido un 102, mientras Canarias ha sacado un 56, lo que a juicio de FADSP ejemplifica las «claramente excesivas y no razonables diferencias» entre CCAA, ha señalado su presidente, Marciano Sánchez Bayle, en rueda de prensa.
En este informe, que lleva realizando FADSP desde 2004, han subido seis comunidades autónomas con respecto al anterior análisis de la asociación: Asturias y Valencia (3 puestos), así como Navarra, Baleares, Galicia y Cataluña (1 puesto). Bajan posiciones siete: Madrid y Andalucía (3 puestos); La Rioja y Murcia (2 puestos); y Castilla y León, Extremadura y País Vasco (1 puesto).
FADSP denuncia que, aunque en los 4 últimos años se ha producido un «aumento presupuestario» tras los recortes de la crisis, los incrementos han ido dirigidos «de manera casi exclusiva» a la crecida del gasto farmacéutico (18% entre 2014 y 2018) y a las privatizaciones.
El informe revela que después de las anteriores elecciones autonómicas se ha producido un «ligero incremento» en los presupuestos, aunque «sigue habiendo» una gran diferencia con los de 2009 y algunos cambios «significativos» en las CCAA en las que ha cambiado el color del gobierno. «No obstante, conviene tener en cuenta el ajuste de gasto que propone la UE y del cual lo previsible es que una parte significativa recaiga sobre los servicios sanitarios», apuntan.
«Estos recortes se han evidenciado, sobre todo, en los trabajadores sanitarios, que han sufrido una disminución general aparte de un notable empeoramiento de sus condiciones de trabajo, pero también en el funcionamiento del sistema sanitario, especialmente en lo que respecta a las listas de espera, que han empezado a generalizarse de forma preocupante en Atención Primaria (AP)», critican en su informe.
Al respecto, Sánchez Bayle ha insistido en que los recortes en Sanidad durante la crisis «todavía no se han recuperado». «Sigue habiendo listas de espera intolerables, y ahora preocupantes en AP. La diferencia entre CCAA es muy elevada. La privatización es el elemento que más ha deteriorado la situación en Madrid. Se sigue evidenciando una gran disparidad en los servicios sanitarios entre las CCAA, que no se reduce, lo que pone en peligro la necesaria cohesión y equidad entre territorios», ha lamentado.
Si se comparan las posiciones relativas de las CCAA entre este informe y el de 2015, lo que evaluaría la evolución durante la pasada legislatura autonómica, se observa de acuerdo con el color político del gobierno autonómico, que entre aquellas CCAA gobernadas por el PP, una mejoró su posición (16%), 3 empeoraron (50%) y 2 continuaron en la misma; entre las gobernadas por el PSOE, 4 mejoraron (44%), 2 empeoraron (22%) y 3 permanecen igual; y en las que tuvieron gobiernos nacionalistas 2 mejoraron y una empeoró. «Parece deducirse que la evolución fue mas positiva en las que no tuvieron gobiernos conservadores», ha argumentado Sánchez Bayle.
En el mismo sentido, el presidente de FADSP ha detallado que la diferencia entre CCAA es «claramente excesiva»: de 46 puntos sobre un máximo alcanzado de 102. La ratio entre la comunidad autónoma de mayor puntuación y la de menor puntuación es de 1,82, «una de las mayores registrada en los informes realizados», ha apostillado. Así, en 2018 fue de 1,77; en 2017 de 1,83); en 2016 de 1,80; en 2015 de 1,81; y en 2014 de 1,76.
Sánchez Bayle ha matizado que el informe compara entre comunidades autónomas, por lo que «no significa que la primera (Navarra) esté bien, sino que está mejor que las demás en comparación». «De manera que si todas hubiesen mejorado o empeorado en la misma cuantía, no se producirían diferencias en los resultados y, por lo tanto, los cambios de posición responden a las posiciones relativas», puntualiza FADSP en su texto.