El marido, identificado como Thomas R.H., sigue detenido en los calabozos de la Guardia Civil; La investigación es dirigida desde el Juzgado de Violencia sobre la mujer Número 1 de Arona.
Los cadáveres de Silvia, la alemana de 39 años de edad hallada muerta hoy en una cueva, situada entre el barranco del Burro y el barranco del Agua, dentro del término municipal de Adeje, y su hijo de 10 años, encontrado también sin vida en el mismo lugar, presentan señales externas de haber fallecido como consecuencia de los golpes que recibieron, según la información captada en fuentes cercanas a la investigación.
El marido de Silvia, también alemán, de 43 años e identificado como Thomas R. H., se encuentra detenido en los calabozos de la Guardia Civil como presunto responsable de este doble crimen, a la espera de que pase en los próximos días a disposición del Juzgado de violencia sobre la mujer número 1 de Arona.
Los hechos que nos ocupan se iniciaron a media tarde de ayer martes, cuando el otro hijo de la pareja, también varón y de apenas tres años y medio de edad, apareció por la zona de La Quinta en evidente estado de shock.
Aunque al principio costó comunicarse con el pequeño dado su nerviosismo y que no entiende el español, finalmente logró explicar a policías locales de Adeje que había salido huyendo de una cueva donde su padre había maltratado a su madre, y que había mucha sangre en la zona.
Lógicamente, ello despertó todas las alarmas y propició la activación de un amplio dispositivo de emergencias en el que participaron un centenar de miembros de emergencias, en un esfuerzo que dio sus resultados esta mañana con la triste noticia de la localización de los cuerpos sin vida en la referida cueva, localizada no muy lejos de donde apareció el pequeño.
Aunque la investigación sigue su curso y se encuentra en una fase inicial, el presunto doble crimen pudo tener lugar cerca del mediodía de ayer, o al menos se han recogido algunos testimonios entre los vecinos que aseguran haber oído gritos de niños a esas horas.
La familia en cuestión es una pareja de alemanes en la que él, Thomas, residía habitualmente en Adeje, si bien pasaba temporadas en su país. Por contra, ella iba y venía de Alemanía, y había llegado con los dos niños hace poco a Tenerife. En principio, no consta a las autoridades españolas que hubiera denuncias previas por malos tratos, pero, como se ha dicho, la investigación se ha dirigido desde un primer momento como un crimen de origen machista.
Por ahora, el detenido sí ha reconocido haber discutido con la mujer, pero no colaboró en la localización de la cueva y, por ende, de los cadáveres. Fue arrestado en la noche de ayer por las autoridades en su vivienda, situada en el casco urbano de Adeje. Al parecer, cuando los agentes se personaron en el lugar lo encontraron durmiendo.
A la espera de que la autopsia confirme que estamos ante un caso de violencia de género, en caso de confirmarse se trataría de la cuarta mujer y el primer menor de edad que fallecen por esta causa en Canarias desde que empezó el año, tras el asesinato de tres mujeres acaecidos en Lanzarote el día de Año Nuevo, en La Laguna a mediados de enero y, por último, en Ofra el pasado febrero.