Se ha demostrado que la vitamina D es una barrera contra las enfermedades respiratorias y la Covid-19 no es una excepción en el caso.
Un estudio estadístico con datos de 19 estados europeos ha concluido que los países con los valores de vitamina D más bajos entre su población han sufrido tasas de mortalidad más altas de Covid-19 durante la pandemia.
«Los datos de este estudio estadístico muestran una asociación fuerte y estadísticamente significativa entre la deficiencia de vitamina D y el número total de muertes por Covid-19», concluye el estudio, elaborado por un equipo multinacional de investigadores.
A pesar de ser uno de los países con mayor insolación anual de Europa -el sol es una de las principales fuentes de esta vitamina, pero no la única- España tiene, según los datos presentados por estos investigadores, el segundo valor más bajo de vitamina D en el continente y también uno de los números más altos de fallecidos.
España, la cuarta mayor tasa de mortalidad de Europa
Los datos del estudio publicado este mes son contundentes. Los países con un valor del metabolito 25-hidroxivitamina D -la sustancia con la que se mide la vitamina D en la sangre- inferiores a 50 (España tiene 42,5) han tenido una mayor tasa de mortalidad de Covid-19.
El índice de mortalidad bruta, que indica el número de fallecidos por cada 100.000 habitantes hasta el pasado 22 de enero, fue de 118,6 en España, solo superado por Bélgica, Reino Unido y República Checa.
Ante esta deficiencia de vitamina D que realmente padece casi todo el continente, parece que la mejor solución son los suplementos nutricionales y la adaptación de la dieta para hacerla lo más rica posible en esta sustancia.