El Juzgado de Instrucción Número 3 de Las Palmas de Gran Canaria impuso una multa de 720 euros por delito de desobediencia grave a un hombre, de 50 años, por burlar la orden de confinamiento al menos en tres ocasiones para pedir limosna en la cola de acceso al supermercado Mercadona de la calle Pintor Pepe Dámaso, en el barrio de Tamaraceite, de Las Palmas de Gran Canaria.
Por otro lado se ha condenado a un hombre a pagar multas que suman 840 euros a un vecino de Santa Brígida (Gran Canaria), de 31 años, con al menos dos condenas penales previas.
El condenado fue visto el 11 de abril “violando” la cuarentena por el coronavirus a bordo de un ciclomotor, con el que se dio a la fuga cuando la policía le dio el alto y lesionó a un agente al forcejear con él cuando finalmente fue detenido. Por ello, se le condena por un delito de desobediencia grave a agente de la autoridad y por otro leve de lesiones.
En la sentencia dictada por el Juzgado en su última guardia (el pasado 13 de abril) se recoge que el 11 de abril, sobre las 12.45 horas, el ahora condenado circulaba en una moto por la calle Nicolás Monche López de Las Palmas de Gran Canaria “sin motivo justificado” y con pleno conocimiento de que se saltaba el confinamiento.
Así, según recoge la sentencia, cuando los agentes de la Policía Nacional que patrullaban la zona le dieron el alto, el acusado “ignorando las indicaciones de los agentes”, aceleró el ciclomotor, fue entonces cuando se inició una persecución que continuó a pie hasta que uno de los agentes logró darle alcance, forcejeando el acusado con el agente hasta que ambos caen al suelo, si bien pudo ser reducido.
Por último, el acusado admitió su culpa y se conformó con la pena solicitada por el fiscal para beneficiarse de una rebaja en su cuantía, siendo la sentencia de conformidad firme.