La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) estima que, de mantenerse los actuales precios de la electricidad, este mes de abril será «con diferencia» el más caro de los ocho años desde que existe la tarifas regulada PVPC, con un precio un 59% más caro que el precio medio en este mes.
Así, si los precios actuales no bajan durante la última semana, OCU cifra que el mes cerrará con un precio de 62,23 euros por megavatio hora (MWh), un 59% más caro que el precio medio de los meses de abril y un 24% más que en 2019, que fue el siguiente mes más caro.
La asociación señala que a pesar de que tradicionalmente el mes de abril es un mes con un precio de la energía bajo, «las tres primeras semanas de este mes apuntan a que será el mes de abril más caro de historia reciente» y unas 3,5 veces más caro que «los extraordinarios y anómalos precios del pasado de abril debido al parón por el efecto de la pandemia».
UN INCREMENTO DE 7 EUROS EN LA FACTURA.
De esta manera, avisa de que esta subida del precio de la electricidad supondrá un incremento de 7 euros en la factura de un hogar medio -con una potencia contratada de 4,6 kWh y un consumo de 3.500 kWh al año-.
Así, la factura del mes de abril será de 69,14 euros, frente a los 62,25 del pasado mes de marzo, un mes que ya supuso una subida importante subida de la factura de la luz. OCU denuncia que en solo dos meses la factura de la electricidad se ha incrementado 14 euros.
Este incremento en el precio del ‘pool’ es debido, principalmente, al aumento de los precios de los derechos de emisión de CO2, que protagonizaron también las subidas del precio de la electricidad durante parte de 2019. Por otra parte, se ha incrementado el precio del gas utilizado por los ciclos combinados para la producción de energía eléctrica.
DENUNCIA QUE LA HIDROELÉCTRICA FIJA EL PRECIO EN EL MERCADO.
Sin embargo, OCU denuncia que no son estas tecnologías las que están fijando el precio en el mercado OMIE, sino las plantas de generación hidroeléctrica que son suficientes -con el resto de las tecnologías más económicas- para cubrir la demanda de la mayor parte de las horas durante este mes de abril.
En este sentido, pese a los bajos costes de las centrales hidroeléctricas, la asociación cree que éstas «aprovechan la oportunidad que les ofrece el sistema marginalista y su capacidad para regular su producción, para ofertar su energía a un precio solo ligeramente inferior a la de sus competidores (térmicas, ciclos combinados…)».
De esta manera, denuncia que este sistema marginalista empleado por OMIE para fijar el precio mayorista, «amplifica el problema», ya que facilita que estos incrementos en los costes de determinadas tecnologías «sean aprovechados sistemáticamente para generar ingresos extraordinarios en el resto de las tecnologías», y pide a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) que vigile «las anómalas subidas del precio de la electricidad que se han producido a lo largo de 2021 y abra una investigación para asegurar la transparencia en la fijación del precio».