Hace unas horas el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, comparecerá este miércoles en el Congreso para volver a dar cuentas de la evolución de la pandemia y el funcionamiento del estado de alarma, cuyo levantamiento descarta ya totalmente adelantar al mes de marzo, tal y como en octubre se comprometió ante la Cámara a estudiar si así se lo pedía los gobiernos autonómicos. Sin embargo, la portavoz del Ejecutivo, María Jesús Montero, ha descartado este martes que pueda haber alguna modificación antes de la fecha prevista del 9 de mayo. «No hay ninguna pretensión de modificar la vigencia del estado de alarma», ha asegurado.
Montero ha adelantado la postura que defenderá este miércoles Sánchez en el Congreso, a pesar de que no ha hecho esta reflexión con las comunidades autónomas, tal y como se comprometió a hacer en octubre para tener el apoyo del PP o de ERC al segundo decreto de alarma, el que está vigente a día de hoy.
El texto que aprobó el Consejo de Ministros establecía que esta vez tendría una duración de 6 meses -desde el 9 de octubre hasta el 9 de mayo-, a diferencia de lo que ocurrió durante la primera ola de la pandemia, cuando Sánchez tuvo que comparecer cada 15 días en el Congreso para pedir extensiones por dos semanas cada vez. A medida que se alargaba la pandemia, el confinamiento y el número de fallecidos, cada vez fue más difícil para Sánchez reunir los votos necesarios, en unas comparecencias con un indudable «desgaste» para el presidente y para el Gobierno.
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Para evitarlo, el presidente puso una duración de seis meses al actual estado de alarma, aunque para tener luz verde del Congreso tuvo que comprometerse a revisar la fecha del 9 de mayo, para eventualmente adelantarla al 9 de marzo si la evolución de la pandemia así lo permitía.