El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, volverá a pedir el miércoles casi con seguridad al Congreso una nueva prórroga del estado de alarma, la tercera, que prolongará hasta el 11 de mayo un confinamiento que, sin embargo, podría no ser tan estricto en la recta final. El equipo técnico y político que estudia la progresiva vuelta a la “nueva normalidad” tras la emergencia sanitaria por el coronavirus ultima una decisión para hacer más llevadero el encierro a algunos colectivos y permitir que a partir del 26 de abril los niños puedan salir a pasear o esté permitido hacer deporte al aire libre.
Estas dos posibilidades llevan bastante tiempo sobre la mesa, como también lo están otras como restringir por un tiempo más prolongado la salida de sus casas de las personas de más edad, y por tanto más vulnerables. La diferencia es que ahora la decisión es inminente, puesto que quedan apenas días para que el Consejo de Ministros del martes apruebe la petición de la prórroga y para que el Congreso la vote al día siguiente.
La prórroga estaba prácticamente confirmada desde que hace 10 días el presidente se mostrara “convencido” en el Congreso de que volvería para pedir prolongar el confinamiento.