El refrigerador es un elemento esencial en la cocina, ya que nos permite mantener nuestros alimentos en óptimas condiciones y utilizarlos para preparar deliciosas recetas. Sin embargo, también puede convertirse en nuestro peor enemigo si no tomamos ciertas precauciones, ya que puede impregnar los alimentos con olores desagradables. Es por eso que es importante evitar guardar ollas de comida en el refrigerador, y a continuación te explicaremos por qué.
El refrigerador es un electrodoméstico fundamental en cualquier hogar, no solo en la cocina. Además de conservar los alimentos, también puede ser utilizado para otros fines, como el cuidado de la piel e incluso para almacenar medicinas en buen estado. Sin embargo, debido a la diversidad de elementos que podemos refrigerar y a veces por pura pereza, es posible que guardemos ollas de comida sin tapa y sin vaciar su contenido. Esto puede generar problemas que podrían dañar tu refrigerador y posiblemente afectar tu salud. ¿Cómo podemos solucionar estos problemas? Es bastante sencillo.
En ocasiones, por falta de tiempo, tendemos a guardar los alimentos cocinados directamente en la olla o cazuela en la que se prepararon, en lugar de transferirlos a recipientes de plástico bien cerrados. Esto se debe a que las condiciones de conservación en una olla o cazuela no son las más adecuadas. El ambiente frío y húmedo del refrigerador, combinado con los recipientes de aluminio, acelera el proceso de oxidación, lo cual puede afectar las propiedades de los alimentos. Incluso si utilizamos recipientes de acero, estos resultan menos higiénicos por la misma razón, ya que la humedad también acelera la oxidación.
Contrariamente a la creencia popular de que es perjudicial poner comida caliente en el refrigerador, esto es parcialmente falso. La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) señala que no hay ningún problema en refrigerar alimentos calientes. De hecho, la FDA menciona que los alimentos no deben dejarse fuera de la refrigeración por más de dos horas, ya que a partir de ese punto comienza el proceso de descomposición. Por lo tanto, es común y seguro almacenar comida caliente en el refrigerador.
Una recomendación adicional de la FDA es que los alimentos se guarden en recipientes pequeños, ya que esto acelera el proceso de enfriamiento. Esto es especialmente importante cuando se trata de alimentos calientes, ya que el enfriamiento rápido ayuda a prevenir el crecimiento de bacterias y la descomposición de los alimentos.