Cansados y hartos de un vecino que ataca y agrede sin motivo al resto, los habitantes del núcleo de La Montaña, en Los Realejos, se manifestaron ayer para pedir que la Justicia tome cartas en el asunto antes de que ocurra “una desgracia que tengamos que lamentar”.
La mayoría lo hizo con una cacerolada desde sus balcones -debido a la imposibilidad de estar en la calle por la actual situación sanitaria- aunque algunos recorrieron con las distancias pertinentes algunas vías, apoyados por el ruido de las ollas, pitos y reclamos en los que pedían, con ruido, que “se haga justicia” o dejaban claro que “no quieren un barrio con miedo”. Lo hicieron durante casi 40 minutos vigilados por efectivos y patrullas de la Policía Local.
Las constantes agresiones, amenazas y actos violentos por parte de este sujeto no son nuevas sino que “llevan décadas”, aseguran los afectados, pero en la última semana se han agravado dejando a una de sus víctimas con dos costillas rotas y a otra, con la cara desfigurada tras golpearlo con un palo.
En el primer caso, se pudo salvar gracias a que varias personas presenciaron lo ocurrido y llamaron a la policía nacional que se presentó “inmediatamente”, asegura la afectada.
Tanto ella como las otras víctimas han presentado las correspondientes denuncias ante la autoridad judicial “por allanamiento de morada, intento de asesinato y amenazas graves, entre otras acusaciones, pero según nos dice el juez, no son motivos suficientes para que vaya preso”, declaran.
Los vecinos y vecinas del barrio sienten miedo por la presencia y comportamiento de este señor, “ya que más de una vez ha dicho públicamente que busca violar o matar para ingresar de nuevo en prisión”. Además, porque actualmente vive en la calle, “ya que nadie quiere darle alojamiento debido a su comportamiento violento”, añaden en la nota los afectados.
Así lo afirman en un comunicado en el que advierten de las consecuencias que pueden tener si la Justicia no actúa rápidamente. “¿A qué espera la Justicia? ¿A que ocurra un acto irremediable? ¿A que acabe con la vida de alguien o viole a alguna mujer o menor?”, se preguntan.
“Por eso han decidido protestar ayer, igual que lo hicieron el sábado pasado a las puertas de los Juzgados de La Orotava, para apoyar a una de las víctimas que fue a declarar. Y lo seguirán haciendo cada vez que sea necesario, junto a la recogida de firmas que han iniciado para presentar en el Ayuntamiento y ante el Diputado del Común.
El primer teniente de alcalde de Los Realejos, Adolfo González, confirma que hay un temor generalizado y que el grupo de gobierno “es consciente de la situación”. Por este motivo, está “en permanente contacto con los afectados”, tanto el alcalde, Manuel Domínguez, como el concejal de Seguridad y Emergencias, José Andrés Pérez, y la Policía Local, que tiene indicaciones de reforzar la seguridad y la vigilancia en la zona estos días en colaboración con la Nacional.
“Ha tenido actitudes violentas, reiteradas y lo que piden todos los vecinos es que se hagan efectivas las resoluciones judiciales y que vayan a proteger a las personas y darle tranquilidad al barrio ya que el temor que hay en la calle es justificado”, corrobora.
MAYOR SEGURIDAD
“Como no puede ser de otra manera, el Ayuntamiento está del lado de los vecinos, haciendo un seguimiento estrecho al caso y apoyándolos con mayor presencia policial”, sostiene Adolfo González, quien aclara que “si la justicia no es determinando poco pueden las administraciones al no tener competencia”.