A una semana de la llegada de la primavera, el invierno se ha querido despedir con fuerza en Canarias con la visita de la borrasca Celia, que ayer dejó vientos huracanados en Tenerife con cientos de incidentes, que en algunos casos superaron los cien kilómetros por hora, sobre todo en las cumbres del Teide, el área metropolitana y el Valle de Güímar, aunque también se dejó notar en los municipios del suroeste, como Adeje y Arona.
A la espera de que remitiera el viento durante la noche, el balance deja a una señora herida grave en Adeje, al caerle un muro, y otra persona herida de carácter leve en Santa Cruz, al caerle un semáforo, mientras los daños se produjeron, sobre todo, en mobiliario urbano, caída de árboles, farolas, carteles y muros de fincas o viviendas particulares.
El Cabildo activó a primera hora de la mañana, de manera preventiva y debido a los fenómenos meteorológicos adversos, el Plan Insular de Emergencia (PEIN), toda vez que el Gobierno de Canarias decretó situaciones de alerta por viento y fenómenos costeros en la Isla, así como prealerta por nevadas en cotas de 1.500 metros, lo que obligó a cortar el acceso a Las Cañadas del Teide desde las carreteras del sur y norte de la Isla. “La situación meteorológica en la Isla y especialmente en zonas de cumbre están siendo complicadas”, indicó el presidente del Cabildo, Pedro Martín.
El Ayuntamiento de Santa Cruz decidió ayer cerrar al público la feria de carnavales y las plazas y parques ante el riesgo de caída de ramas y árboles. A lo largo de la mañana, desde el Cecopal se gestionó medio centenar de incidencias relacionadas con el viento, como desplazamiento de contenedores, caídas de ramas y árboles, vallados, carpas e infraestructuras, cartelería en riesgo y mobiliario urbano. Uno de los puntos del municipio en el que más daños se produjeron fue en la playa de Las Teresitas, donde las rachas de viento rompieron y desplazaron diversas infraestructuras, desde carpas a contenedores, elementos de los quioscos e incluso el servicio de hamacas. Además, fue necesario cortar a la circulación el carril más próximo a la línea de playa por haberse inundado tras las lluvias debido a la gran cantidad de arena levantada por el viento.
En La Laguna también se produjeron incidentes por las fuertes rachas de viento, con caída de árboles y postes de luz y telefonía en varias zonas del municipio, sin afectar a los ciudadanos, más allá de un poste que cayó sobre un vehículo en Geneto. La Laguna activó el Cecopal desde la tarde del domingo.
Por su parte, en Adeje, una mujer resultó herida de carácter grave, al caerle encima un muro, provocándole graves daños, como un traumatismo craneoencefálico severo, por lo que la afectada tuvo que ser trasladada en ambulancia sanitarizada del SUC a Hospiten Sur. En concreto, los hechos se produjeron a las 17.06 horas, cuando el muro cayó desde varios pisos de altura sobre la pérgola de un bar donde se encontraba la señora. También en Adeje se produjo la caída de una valla que dañó seriamente a dos vehículos en una calle del casco, mientras que unos bidones de agua, del mismo edificio, cayeron al patio interior, con suerte de no producir daños personales.
En Arona, los trabajadores de mantenimiento, limpieza, zonas verdes, litoral y socorristas fueron activados a primera hora de la mañana para responder ante cualquier incidencia, entre ellas, asegurar los elementos externos para evitar que caigan a la vía pública, inspección y poda de árboles y ramas, y limpieza de las vías y calles. Entre otras incidencias, solo se produjo la caída de alguna señal de tráfico, así como de una palmera y ramas de árboles.
Igualmente, el viento llegó a superar los 100 km/h en el Valle de Güímar, donde se activaron los PEMU por parte de los tres ayuntamientos. En Güímar se realizaron 63 actuaciones relacionadas directamente con incidencias provocadas por Celia. La mayor parte de las intervenciones llevadas a cabo estuvieron relacionadas con caídas de enseres desde viviendas, rotura de mobiliario público, caída de farolas, caída de ramas y varios colapsos de muros.
La incidencia del viento en Candelaria generó algunas caídas de postes de electricidad, muros y contenedores en el municipio. Al mediodía se activó al Consorcio de Bomberos para retirar unas planchas de las claraboyas del Ayuntamiento por el riesgo de desprendimiento.
En Arafo, los mayores daños se produjeron en el cementerio, con caídas de algunos árboles que dañaron varias tumbas, así como desprendimientos de farolas que tenían riesgo de caerse, por lo que se avisó a Endesa, sin que llegara a afectar a la red eléctrica, como en toda la Isla.