La Guardia Civil investiga al propietario de una vivienda, un varón de 37 años, por provocar una pelea como medida de presión para echar a los inquilinos del inmueble, según una nota de la Benemérita.
Los hechos ocurrieron en el municipio de Granadilla de Abona (Tenerife) el pasado 27 de marzo, cuando se produjo una riña entre varias personas en una finca situada en el núcleo de Atogo.
Al llegar al lugar, los agentes se encontraron varias personas de nacionalidad italiana con signos de haber sufrido una agresión. Dos estaban tendidos en el suelo y tenían las heridas más graves.
Uno de ellos presentaba una lesión abierta en la parte frontal de la cabeza y varios golpes en la espalda, y el otro habría sufrido lesiones en la cara y un golpe sangrante en la espalda.
Una mujer que tenía una herida sangrante en el ojo relató a los agentes que las lesiones fueron producidas con barras de hierro y piedras por varios ciudadanos de nacionalidad rumana que no conocían.
Los heridos eran una familia de cuatro personas, tres adultos y un niño, que relataron que se encontraban en su vivienda cuando fueron abordados por estas personas.
Dos de los agresores también resultaron heridos, uno por disparos con una escopeta de perdigones y otro sin lesiones aparentes. En el lugar de los hechos se localizó una escopeta de balines y armas blancas.
En ese momento, todas las víctimas fueron trasladadas a diversos centros hospitalarios y los seis adultos fueron acusados de lesiones y participar en la riña tumultuaria.
En el transcurso de sus pesquisas, los agentes que instruían el caso obtienen fundadas sospechas de que la riña venía inducida por el propietario de la vivienda donde residían los ciudadanos italianos y como medio de presión para que abandonaran el inmueble.
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