Siguiendo la Eurocopa de fútbol, recibo algunas noticias con cierto estupor y asombro. El otro día, en el partido España-Croacia, un comentarista deportivo afirmaba con contundencia que Sergio Ramos había sido muy valiente al asumir la responsabilidad de lanzar un penalti, que por cierto lo tiró muy mal y lo falló. Aquello me dejó preocupado. Porque, que yo sepa, que se pite a favor de tu equipo el llamado máximo castigo, y se tenga que tirar el penalti, es una circunstancia que se da con cierta frecuencia en este deporte. Es más, los que lo practican, suelen entrenar habitualmente el lanzamiento de este tipo de faltas. Incluso, tengo la información de que, en el máximo nivel, se cobran cifras millonarias por practicar este deporte y por entrenarse. Les confieso una cosa, he visto en mi larga vida tirar un montón de penaltis, y los que los ejecutaban nunca me parecieron valientes. Simplemente, eran jugadores de un deporte que realizaban una acción del mismo, unas veces con más acierto que otras. Creo que se es valiente practicando otras cosas, como la Fórmula 1, el motociclismo, los toros…, donde existe un riesgo, donde tu vida puede correr peligro. Pero ser valiente por tirar un penalti… Hacer algo que practicas casi todos los días y que no comporta ningún riesgo físico, no entiendo por qué puede ser considerado un acto de valentía. Al día siguiente, fui a Correos a poner una carta certificada. Tras hacerlo reflexioné que si ve la acción el comentarista deportivo, igual hubiera afirmado que la funcionaria había sido muy valiente por haber hecho una cosa que hace casi todos los días y que no comportaba ningún riesgo físico. Bueno, corría el riesgo de equivocarse, de hacerlo mal, como en tantas y tantas actividades que se hacen en la vida todos los días. También reparé en que cuando la funcionaria me hizo el trámite con éxito, los compañeros y compañeras de Correos, no corrieron a abrazarla, ni se tiraron sobre ella para formar una montaña humana. Quizás en el tiempo se han ido degenerando las formas de las celebraciones por los éxitos deportivos. No guardo en mi memoria imágenes de mi niñez viendo montañas configuradas por brazos, cabezas y piernas tras la consecución de un gol. Algo de culpa de este exceso, y de hasta una falta de consideración con el rival vencido, creo que la tienen la prensa especializada y los comentaristas deportivos, que han tenido la valentía de ensalzarlo. Deja ver…
Ser valiente y las celebraciones
El otro día, en el partido España-Croacia, un comentarista deportivo afirmaba con contundencia que Sergio Ramos había sido muy valiente al asumir la responsabilidad de lanzar un penalti, que por cierto lo tiró muy mal y lo falló