La DGT asesorará en el diseño de los enlaces del carril bus-vao de la TF-5

La Consejería de Obras Públicas, el Cabildo de Tenerife y la Dirección General de Tráfico estudian la viabilidad de la futura infraestructura

Representante de la DGT, el Cabildo y la Consejería de Obras Públicas     participaron ayer en el encuentro. Sergio Méndez

Las administraciones públicas implicadas, esto es el Gobierno de Canarias, el Cabildo tinerfeño y los ayuntamientos, dieron hace dos semanas el visto bueno definitivo a la ejecución del carril bus-vao en la Autopista del Norte, que presumiblemente se financiará con cargo al nuevo convenio de carreteras entre la Comunidad Autónoma y el Estado. El objetivo, una vez alcanzado el consenso, es que la Consejería de Obras Públicas pueda iniciar el próximo mes de septiembre la redacción del proyecto, una vez se terminen de aclarar algunos aspectos técnicos, como la ubicación de aparcamientos disuasorios y los puntos a soterrar en la TF-5.

Uno de los aspectos más complejos a la hora de proyectar esta infraestructura es la conexión entre el propio carril bus-vao y los distintos enlaces planteados que, por el momento y según los estudios previos, son cinco. Con el fin de colaborar con el diseño de esta nueva infraestructura, la primera de toda Canarias, se ha pedido la colaboración de la Dirección General de Tráfico (DGT), ya que se trata de la administración competente de gestionar este tipo de carriles y quien una vez entre en funcionamiento se hará cargo, a priori, también del tinerfeño.

Este acuerdo se adoptó ayer en una reunión mantenida entre responsables de la DGT, de la Consejería de Obras Públicas y del Cabildo de Tenerife. Además, se decidió que las instituciones regionales e insulares remitirán a la Dirección General los informes elaborados al respecto con el fin de apostar más datos sobre este proyecto, para también analizar otros aspectos como los horarios, o el trazado.
Al respecto, el viceconsejero de Infraestructuras y Transportes, Alexis González, matizó que uno de los aspectos más complicados será la proyección de los enlaces con el carril bus-vao y con los aparcamientos disuasorios y los intercambiadores de transporte, además del hecho de que mientras se ejecuta la obra se mantendrá el tráfico en la vía. “Hemos querido pedir la consulta a la DGT, quien es la competente y gestiona el carril bus de Madrid, para que ayude en el diseño dado su experiencia, ya que no queremos provocar un problema en vez de ayudar a solucionar los atascos”, explicó.

El responsable regional matizó que desde la Dirección General de Infraestructura Viaria se ha analizado el documento previo elaborado por el Cabildo y según se ha podido observar el aspecto más complicado de definir será los accesos a la infraestructura destinada al transporte público y los coches con más de dos pasajeros, que ocupará los dos carriles centrales.

“Una vez la DGT elabora su informe sus propuestas serán incluidas en el documento definitivo”, añadió.

Por su parte, el director de Proyectos Estratégicos del Cabildo, Miguel Becerra, recordó que la decisión política de ejecutar esta infraestructura se tomó hace dos semanas por parte de las a distintas instituciones públicas pero ahora se ha pedido la colaboración y las sugerencias de la DGT. Sobre la futura gestión del carril bus-vao matizó que aunque es competencia del Estado, una posibilidad al carecer este ente de los recursos necesarios en la Isla es que se delegue al Cabildo y se controle a través del Centro Coordinador de Carreteras. Recalcó que durante el encuentro, la DGT no se posicionó sobre la viabilidad de esta dotación en la Isla, ya que primero deberá analizar los informes que tanto el Gobierno insular como Obras Públicas remitirán.

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